El Congreso Nacional de Paraguay se prepara para recibir a los nuevos miembros que jurarán sus cargos mañana, 30 de junio. Con la entrada de una nueva camada de parlamentarios de diversas extracciones políticas, se espera un renovado escenario en el panorama legislativo.
Las negociaciones previas a la primera sesión del Congreso han arrojado resultados positivos, ya que las diferentes fuerzas políticas han llegado a un acuerdo para la presidencia y la conformación de las comisiones tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados. Esto indica que, aparentemente, no habrá sorpresas en la elección de las autoridades parlamentarias.
Sin embargo, uno de los temas prioritarios que deberán abordar los nuevos congresistas, especialmente en la cámara de Senadores, es la crisis que afecta al Banco Central del Paraguay (BCP). Este organismo, considerado la principal banca matriz de la república, ha sido objeto de un escándalo financiero de gran envergadura debido a acusaciones de «autoblanqueo» para su actual presidente, José Cantero Sienra, y uno de los directores de la entidad.
La sindicatura de la Contraloría General de la República ha solicitado un informe detallado a José Cantero Sienra, en el que se le pide una copia autenticada del acta de sesión del directorio del 8 de junio pasado. La respuesta debe ser proporcionada en un plazo de tres días hábiles, según la funcionaria Renata Olmedo, síndica de Contraloría.
El escándalo del «autoblanqueo» ha generado una gran controversia en el ámbito financiero y político del país, ya que pone en entredicho la imparcialidad y la transparencia en la toma de decisiones por parte de las autoridades del Banco Central del Paraguay. El presidente del BCP, en complicidad con los miembros del directorio y el Superintendente de Bancos, sancionó a Interfisa Banco por irregularidades en la gestión de sus finanzas, encubiertas mediante el maquillaje de pérdidas. Sin embargo, José Cantero se excluyó a sí mismo de dicha sanción, lo que ha sido catalogado como arbitrario y con motivaciones políticas.
La falta de mención del periodo en el cual José Cantero se desempeñó como gerente general de Interfisa Banco en la resolución también ha despertado sospechas. Según la denuncia y el sumario, las irregularidades en la entidad financiera se remontan al año 2016, cuando José Cantero ocupaba el cargo de gerente. Sin embargo, el Banco Central del Paraguay solo sancionó a los gerentes que le sucedieron en años posteriores.
Ante este escenario, el Banco Central del Paraguay se enfrenta a un desafío importante para restaurar su reputación y demostrar su compromiso con la transparencia y la ética en sus operaciones.
La asunción de los nuevos congresistas se da en medio de esta crisis del Banco Central, lo que genera expectativas sobre las acciones que tomarán en relación con esta situación. El Congreso tendrá un papel fundamental en el seguimiento y la supervisión de las investigaciones en curso, así como en la adopción de medidas para fortalecer la transparencia y la integridad del sistema bancario en Paraguay.
Este escándalo financiero plantea desafíos importantes para el país y requiere una respuesta decidida por parte de los parlamentarios recién juramentados. La atención estará puesta en las acciones que tomarán para restaurar la confianza en el sistema financiero y garantizar la transparencia en las decisiones del Banco Central del Paraguay.
