El proyecto de Ley que contaba con media sanción de la Cámara de Senadores, que habla sobre la obligatoriedad de adquisición y puesta en funcionamiento de un sistema de radares con alcance para cubrir y resguardar todo el espacio aéreo nacional, fue tratado en Diputados y debido a la inclusión de modificaciones, este proyecto vuelve a la cámara de origen para su consideración.
Este proyecto de Ley, considerado importante para la seguridad nacional, tiene como fin establecer el control efectivo de todo el espacio aéreo nacional, a fin de evitar el ingreso de aeronaves de forma irregular que puedan estar involucradas en el tráfico ilícito de sustancias estupefacientes, y todo lo relacionado al crimen organizado y delitos conexos.
La autoridad de aplicación será la Fuerza Aérea Paraguaya, que podrá coordinar los mecanismos de control del espacio aéreo con otras instituciones de seguridad, según la exposición de motivos.
Pequeños cambios
Sobre este proyecto, que ya contaba con media sanción de senadores, el diputado Jorge Avalo Mariño (PLRA-Paraguarí) representando a la comisión de Legislación y Codificación, abogó por la aprobación de la iniciativa, pero con modificaciones, al señalar la importancia del mismo y atendiendo que plantea la protección y seguridad nacional. Acotó que modificaciones apuntan a cambiar la terminologías mínimas en al menos cuatro artículos donde se utiliza la palabra “control”, y modificarlo por la palabra “vigilancia”.
Atendiendo que el órgano de aplicación es la Fuerza Aérea Paraguaya, lo que le corresponde es vigilar, mientras que el control le corresponde a la Dirección de Aeronáutica Civil, conforme a convenios internacionales que regula el tráfico aéreo al cual nuestro país esta adherido, indicó el legislador del noveno departamento.
El diputado Edgar Acosta (PLRA-Central), titular de la Comisión de Cuentas y Control de Ejecución Presupuestaria; y Walter Harms (ANR-Itapúa), se adhirieron a la propuesta de la Comisión de Legislación y Codificación, por lo cual se votó como texto base.
Hechas las modificaciones, el proyecto vuelve nuevamente a la cámara de origen para atender los cambios hechos en diputados y de aprobar los cambios pasará al Ejecutivo para su promulgación o veto.
