Luego del incidente registrado en la Unidad de Terapia Intensiva, UTI, ocurrida ayer en el Instituto de Previsión Social, IPS, las autoridades sanitarias brindaron un parte medico del paciente que fue extubado por los familiares, quien dentro de su estado grave se encuentra estable. Por otro lado, afirmaron que la solución a este tipo de problemas no es militarizar el hospital.
«El señor está estable, enseguida se le pudo intubar otra vez y hoy amaneció estable dentro de la gravedad de su patología», manifestó el doctor Carlos Morínigo, Gerente de Salud del IPS. “Tenemos que saber que los hospitales no son un shoppings o un lugar habitual de visitas. El hospital está lleno de infecciones, bacterias y uno viene de la calle y trae también eso», dijo cuestionando la forma en que algunos familiares visitan a sus pacientes.
“La realidad que tenemos hoy es que hay más familiares afuera que pacientes internados, porque tenemos un déficit a nivel de suministro de cosas que tenemos que ir mejorando para cambiar esa realidad», reflexionó el profesional al tiempo de agregar que dentro de las precariedades “nosotros estábamos implementando el tema de la terapia humanizada. Antes era una visita al día, después pasamos a 3 visitas al día y eso implica un cambio de mentalidad con respecto a los familiares a lo que es el manejo de terapia».
Trabajo social y psicólogos
Gerente de Salud del IPS mencionó que desde hacía un tiempo ya se había observado raros comportamientos de algunas personas, pero no creyó que llegaría a tanto “tenían conductas extrañas hace días ya esta gente. Por ejemplo cuando había un evento religioso ellos se tiraban en el piso, ya tenían comportamientos raros. Hace algunos días empezaron a quitarles rosarios a la gente. Había un cambio de conducta que no fue alertado en tiempo y forma. Ahí está también nuestro déficit que estamos trabajando ahora con trabajo social y psicólogos para que ahora estén metidos en los albergues para identificar los probables problemas».
Morínigo no esta de acuerdo sobre la implementación de un esquema de seguridad más estricto en el centro asistencia. “No podemos militarizar un servicio sanitario. Nunca tuvimos un guardia parado que haga la inspección de armas metálicas en la entrada. Evidentemente que tenemos que mejorar en muchos aspectos, pero tampoco es la solución poner seguridad a cada paso”.