Una bebé de tan solo un mes de vida, mientras se encontraba en su babysit, fue picada por un alacrán. Ante el llanto desconsolado de la pequeña, la madre fue a revisar el sitio donde la recién nacida demostraba fuerte dolor y fue allí, donde la madre se percata de la presencia del arácnido y la herida infringida a su hija.
Rápidamente, la madre reaccionó y la llevó hasta el Hospital General de San Lorenzo, donde recibió las primeras atenciones y comenzaron los preparativos para derivarla al centro de atención especializado, el cual es el Instituto de Medicina Tropical (IMT), hasta donde la llevaron y quedó en Terapia Intensiva.
En UTI pero no por gravedad
El doctor Miguel Ángel Cardozo, titular del Instituto especializado en enfermedades tropicales, adelantó que la pequeña se encuentra actualmente internada en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI), pero no por la gravedad de la picadura del insecto, sino más bien por un mejor monitoreo de su estado de salud, expresó el médico responsable de la ex Lacimet en conversación con 1.000 AM.
La niña es revisada constantemente para evaluar su condición y hasta ahora, no fue necesario suministrarle algún tipo de antitoxina para dejar pasar el efecto de la picadura. No obstante, de momento se encuentra estable y demuestra reacciones típicas del tipo de herida que recibió de parte del escorpión.
El calor, también sofoca a estos insectos, por lo que buscan estar en lugares reducidos, oscuros y frescos. Es por ello que cuando en jornadas calurosas como las que vivimos hace unos días, los alacranes salen de sus lugares naturales e invaden nuestros sitios. Al sentirse amenazados, como habrá creído en el caso de la niña en su babysit, ellas levantan el aguijón, dejando una buena dosis de toxina, que hasta puede matar.
En la víspera, fueron atendidos por picadura de alacrán, unas 23 personas, de los cuales 9 salieron positivas a la picadura de los arácnidos, siendo que en dos de ellos se procedió a la aplicación de un antidoto, expresó finalmente el doctor Cardozo.