El superintendente de Salud, Roberto Melgarejo, informó sobre una preocupante situación que involucra a estafadores, la cual motivó la suspensión temporal de las fiscalizaciones en clínicas y entidades prestadoras de servicios de salud. La medida se tomó luego de que la Superintendencia recibiera denuncias de llamadas fraudulentas desde penitenciarías, donde individuos inescrupulosos simulaban ser funcionarios para exigir pagos bajo la amenaza de clausura.
Según explicó Melgarejo, estas personas contactaban a las clínicas advirtiendo sobre supuestas intervenciones inminentes, exigiendo dinero para evitar sanciones. «No llamamos a ninguna institución para avisar fiscalizaciones ni mucho menos solicitar dinero», afirmó tajantemente. Reconoció que inicialmente se decidió suspender las inspecciones durante 15 días, pero esta postura fue revertida tras analizar las posibles consecuencias de relajar los controles.
Seguirán controles previos a los estafadores
La Superintendencia decidió mantener las inspecciones en lugares previamente intervenidos y avanzar con un plan más estratégico que incluye inteligencia y visitas puntuales a nuevas zonas fuera de Asunción.
Además, se extremaron las medidas para garantizar que las clínicas puedan identificar a los funcionarios autorizados. “Todo nuestro personal estará debidamente uniformado, con chalecos y credenciales, y portará documentación que respalde cada intervención”, detalló Melgarejo.
Personas que ya nada tienen que perder
Las llamadas fraudulentas, atribuidas a personas privadas de libertad, encendieron alarmas en la institución. Este tipo de estafa no es nueva en el país y ha afectado a otros sectores como gestores de vivienda y jubilaciones. «Es fundamental que las clínicas verifiquen la autenticidad de los funcionarios y denuncien cualquier intento de extorsión», añadió.
La Superintendencia presentará una denuncia formal ante el Ministerio Público para investigar estos hechos y evitar que se repitan. Asimismo, instó a las clínicas y ciudadanos a reportar cualquier contacto sospechoso, subrayando que estas acciones afectan tanto a las instituciones como a los usuarios que buscan servicios confiables y seguros.
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