La ministra de Salud Pública y Bienestar Social, María Teresa Barán, abordó temas centrales sobre la gestión del Gobierno en relación con el Plan Sumar y la lucha contra las adicciones. Este plan, presentado junto al presidente de la República, Santiago Peña, busca articular los esfuerzos de más de 20 instituciones del Estado para enfrentar de manera integral esta problemática.
Uno de los puntos destacados por Barán fue el papel crucial del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), en la rehabilitación y desintoxicación de personas en situación de adicción. Anunció que próximamente se habilitarán centros residenciales y de rehabilitación especializados (denominados DITRA). Estos centros no solo estarán enfocados en el proceso de desintoxicación, sino que también brindarán tratamiento, rehabilitación y reinserción social, elementos clave para lograr una recuperación sostenida.
Puntos en contra para desarrollar el Plan Sumar
Sin embargo, la ministra resaltó una dificultad importante en la implementación efectiva del plan: la escasez de médicos especialistas en salud mental, particularmente psiquiatras. “El déficit de especialistas en psiquiatría es una realidad”, afirmó Barán, señalando que esta carencia afecta directamente la capacidad del país para ofrecer una atención adecuada.
En respuesta, el Ministerio de Salud ha decidido apostar por un programa internacional denominado MH Gap, cuyo objetivo es formar y capacitar a médicos de atención primaria y personal de salud para manejar casos de adicción.
La ministra subrayó que no todos los pacientes en situación de adicción requieren internación, y que muchos pueden ser atendidos de manera ambulatoria dentro de sus propias comunidades. Esta estrategia busca reforzar la atención primaria y evitar la desintegración familiar y social que conlleva la internación innecesaria.
La secretaria de Estado, hizo hincapié en un enfoque integral, no solo desde el sector salud, sino involucrando a las familias y comunidades de los afectados. Para ella, es crucial trabajar no solo en la rehabilitación individual del paciente, sino también en el entorno en el que este vive, ya que la reinserción sin el apoyo adecuado podría conducir a una recaída.
En este sentido, destacó la colaboración entre el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), además de otras instituciones del Estado para prevenir y combatir el problema desde diversas aristas, incluyendo la reducción de la oferta de drogas y el fortalecimiento del tejido social.
Rol de las ONG’s
Otro tema que surgió en la conversación que mantuvo la ministra con la 970 AM en la mañana del lunes, fue el debate sobre el rol de las organizaciones no gubernamentales (ONG) y el uso de enfoques espirituales en el tratamiento de adicciones.
La titula de la cartera sanitaria no desestimó el aporte que estas instituciones y métodos pueden ofrecer, pero subrayó la importancia de que tanto las ONG como los centros de tratamiento cumplan con requisitos mínimos establecidos por el Ministerio de Salud para garantizar la calidad y seguridad de los pacientes.
En este sentido, informó que por primera vez se cuenta con un Plan Nacional de Salud Mental y Adicciones, que incluye protocolos específicos para evaluar y supervisar tanto instituciones públicas como privadas. Este marco permitirá al ministerio controlar y, si es necesario, clausurar aquellos centros que no reúnan las condiciones adecuadas para el tratamiento de personas en situación de adicción.
En la parte final la ministra valoró los esfuerzos interinstitucionales que se están realizando bajo el liderazgo del presidente Peña y se comprometió a seguir mostrando resultados mensuales. El plan “Sumar”, como destacó Barán, representa una respuesta del Estado ante una problemática que afecta a numerosas familias paraguayas, con un enfoque multidimensional y una visión a largo plazo para lograr cambios sostenibles.
