Los gobiernos de Brasil y Paraguay habrían firmado este martes, en Asunción, un acuerdo que debería poner fin a las diferencias en torno a la tarifa de Itaipú Binacional, según informaciones de la prensa brasileña. En tanto desde el Gobierno nacional señalan que una vez formalizado el acuerdo alcanzado se dará a conocer los detalles.
Según los términos acordados, la tarifa por la energía producida en la planta se ajustará en un 15,4%, pasando de los actuales 16,71 dólares/kW a 19,28 dólares/kW. El nuevo valor es válido para el período de tres años comprendido entre 2024 y 2026, señala un medio brasileño. Por su parte, las autoridades del Poder Ejecutivo anunciaron un avance sustantivo entre Paraguay como para Brasil respecto a la tarifa por la energía eléctrica generada en la hidroeléctrica binacional Itaipú.
Tras la reunión del presidente Santiago Peña con la delegación brasileña, encabezada por la canciller en funciones, María Laura da Rocha, ministros del Ejecutivo paraguayo confirmaron el arribo a acuerdos preliminares sobre la tarifa energética, el plan operativo de la Itaipu, así como las bases para la negociación del Anexo C de la binacional, informa el portal del Gobierno.
Compensación brasileña
En tanto, los datos brasileños dan cuenta que pese al aumento solicitado por Paraguay, no habrá impacto en el precio de la electricidad que se cobra en Brasil. Esto se debe a que la mitad brasileña de la planta inyectará 900 millones de dólares para compensar el ajuste. Del plan de inversiones de la empresa se deducirán unos 300 millones de dólares al año.
El presunto acuerdo, creado por el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, responde parcialmente a la solicitud paraguaya, que originalmente pedía un aumento mayor, hasta poco más de 22 dólares/kW. Además de no conceder la totalidad del ajuste solicitado por sus vecinos, Brasil incluyó algunas “compensaciones estructurales” en el acuerdo.
Uno de ellos fue el establecimiento de un plazo máximo del 31 de diciembre de 2024 para la conclusión de las negociaciones sobre el llamado Anexo C del acuerdo de Itaipú, que define los términos financieros y estructurales de la construcción y operación de la planta. Después de 2026, la tarifa debería caer entre US$ 10/kW y US$ 12/kW, sin considerar gastos que no sean estrictamente operacionales.
Posición paraguaya
Rubén Ramírez, canciller paraguayo, afirmó que el anuncio del precio de la tarifa y los demás aspectos negociados se hará “una vez formalizados los acuerdos” que se lograron alcanzar, e indicó que para realizar ese anuncio “se cumplirán todos los trámites legales correspondientes”.
El canciller indicó que está prevista una reunión entre los presidente de ambos países en el marco de la continuidad de las negociaciones sobre la binacional.
“Estamos siendo prudentes en el anuncio de la tarifa porque la tarifa no es la única cuestión acá. Acá estamos hablando del acuerdo operativo y las bases de la negociación del Anexo C. Entonces queremos anunciar cuando tengamos ya todo firmado y podamos desglozar cada uno de los aspectos de esta negociación”, dijo el ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, durante la conferencia de prensa ofrecida en la residencia presidencial Mburuvicha Róga.
El ministro Goménez dijo que “estamos siendo prudentes y muy serios para anunciar cuando haya firma, que va a ocurrir en los próximos días.
Finalizar los roces en ambos países
Con la finalización del acuerdo sobre el arancel y el avance de la negociación del Anexo C, el gobierno espera poner fin a los roces con los paraguayos que se repiten cada año en torno a la definición del arancel. Una situación similar ocurre desde hace unos diez años entre los gobiernos de Paraguay y Argentina en disputa por las bases económicas de Yacyretá, otra planta binacional.
Con un nuevo nivel de precios a partir de 2027, el cálculo de la energía de Itaipú sólo afectará el costo operacional de la planta, a diferencia de lo que sucede hoy, donde los costos de construcción aún pesan mucho.
Este cambio se esperaba desde el año pasado, cuando se canceló la última cuota del préstamo para la construcción de la planta, 50 años después de la firma del tratado internacional. «El acuerdo pone fin a esta complicada negociación que ocurre siempre que se discuten cambios tarifarios», explicó a Valor una fuente que participó en las negociaciones.
Negocia sobre energía de Yacyreta y Acaray
Además, Brasil también avanza en la comercialización de energía de otras plantas instaladas en Paraguay, en este caso Yacyretá (3,2 mil MW de potencia) y Acaray (200 MW). La expectativa es que estas operaciones aumenten la competencia en el mercado brasileño, reduciendo el precio de la energía para los consumidores. Se deben utilizar mecanismos de compra de energía similares a los que ya utiliza Brasil con Argentina y Uruguay.
Después de este acuerdo, también disminuirá la obligación de Brasil de comprar el excedente de energía producida por la parte paraguaya al valor definido por los gobiernos, lo que aumenta los costos. Con el fin de la obligación, Brasil podrá seguir comprando energía a Paraguay, que no es consumida en su totalidad por el país vecino, sino a precios de mercado.
Brasil y Paraguay tienen derecho a la mitad de la energía generada en Itaipú, con una capacidad instalada de 14 mil MW. Con el volumen producido, la planta abastece el 8,7% de la demanda brasileña y el 86,4% del consumo paraguayo.
Tarifas razonables
La idea inicial del gobierno brasileño era no cambiar el precio, pero la insistencia de Paraguay -que depende mucho más de los ingresos de la planta- llevó a que se llegara al acuerdo. La solución al impasse fue utilizar 300 millones de dólares del superávit anual que inyectará la parte brasileña para compensar el ajuste. La medida representa una opción del gobierno brasileño para utilizar la «inversión en tarifas razonables».
Al igual que en Paraguay, en Brasil se han aplicado recursos en otras áreas no relacionadas con la generación de energía de la central, lo que provoca críticas de los expertos. Esto se debe a que, en lugar de reducir el precio al consumidor, se mantenía alto el costo de la energía para pagar obras de transporte como carreteras, puentes y aeropuertos, especialmente en el Estado de Paraná.
Con el acuerdo cerrado, el gobierno brasileño espera entregar la electricidad producida en Itaipú a un precio de R$ 205 por megavatio-hora (MWh) al consumidor, por debajo del valor promedio de R$ 300/MWh en los contratos que mantienen actualmente las distribuidoras.
FUENTE: https://valor.globo.com/brasil/
LEA TAMBIÉN: Brasil envía su ministro con propuestas de compensaciones para acordar tarifa de Itaipú