El gobernador cartista, Juan Carlos Vera Báez, del departamento de Guairá, fue destituido en la fecha por la Cámara de Diputados por daño patrimonial de G, 18.961.000.000. Vera fue del Movimiento Colorado Añetete y luego pasó al Honor Colorado, de Horacio Cartes. Ni los diputados cartistas pudieron sostener a Vera Báez y ellos se abstuvieron de votar cuando se trató la destitución. El anterior caso fue el del Gobernador de Central, Hugo Javier González, que también fue destituido por hechos de corrupción.
Lo peor que ocurrió en la Gobernación de Guairá es que se verificó el mal uso del dinero que estaba previsto para la reactivación económica después de la pandemia, según fundamentaron los diputados. Hubo 63 votos a favor de la destitución, 9 abstenciones (cartistas) y 8 ausentes. El diputado Pedro Alliana (HC) dijo que le recomendó al gobernador que renuncie y se dedique a su candidatura a senador. Sin embargo, esto no ocurrió.
El interventor, Pablo Vera Insauralde, presentó un informe de 912 páginas para demostrar que existió irregularidades en la administración de Vera Báez. Los documentos estaban a disposición de los legisladores. El Gobernador hacía figurar compras de pollitos, columnas, cal y medicamentos, todos fantasmas, informó la diputada Katya González luego de leer los informes durante la sesión.
El diputado «Bachi» Núñez, del cartismo, señaló que su bancada liberaba los votos, cuando se tenía que decidir sobre la destitución, anunciando así que el cartismo soltaba a uno de sus gobernadores. Previamente, criticó al oficialismo por dejar en el «opareí» un caso que guarda relación con un político corrupto del grupo de Marito.
