El presidente electo, Santiago Peña, eligió para los nuevos titulares del BCP, Asesoría Jurídica de la Presidencia de la República y Procuraduría General de la República; de los cuales, el primero requerirá el acuerdo del Senado.
En ese sentido, Peña propondrá al Senado la designación de Carlos Carvallo Spalding, como próximo presidente del Banco Central del Paraguay (BCP). «Es de la casa», dijo Peña cuando lo anunció, en breve conferencia de prensa en su domicilio. Carvallo es actual presidente de la Financiera #ueno y ya había integrado el directorio del BCP durante 5 años (2015-2020).
Además, Peña, que asumirá el 15 de agosto, anunció que nombrará a Roberto Moreno como director de la Asesoría Jurídica de la Presidencia de la República. Moreno fue Procurador General de la República (2013-2017) durante el gobierno de Cartes. Es autor de varias obras jurídicas y docente universitario.
También anunció a Marco Aurelio González como el futuro procurador general de la República. González fue ex asesor jurídico del Banco Central del Paraguay. González es actualmente director del Instituto del Banco Central del Paraguay y es máster en derecho de la contratación pública.
Peña anunció que con el correr de los días irá anunciando más personas elegidas para que le acompañe en su gobierno.-
EL BCP SUMIDO EN UN ESCANDALO
Actualmente, el Banco Central del Paraguay se encuentra en su nivel de credibilidad más baja, consecuencia del manejo discrecional al que llevó a la institución su actual presidente José Cantero Sienra y su entorno cercano en el directorio de la institución y la Superintendencia de Banco.
La banca matriz se encuentra sumida en un escándalo que estalló con la resolución N.º 7 del 8 de junio, en la que se impuso una significativa multa a Interfisa Banco y a ocho exdirectivos de la entidad. La Superintendencia de Bancos (SIB) presentó una denuncia en julio de 2022, poniendo en tela de juicio las falencias en la exposición de cuentas en el balance de Interfisa Banco.
En el sumario del caso, se revelaron irregularidades como el ocultamiento de pérdidas y manipulaciones contables que datan del año 2016, período durante el cual José Cantero Sienra se desempeñaba como gerente general de Interfisa Banco. Se sospecha que Cantero habría cobrado sumas exorbitantes de dinero por resultados ficticios y se habría beneficiado económicamente de prácticas contables irregulares.
Lo más preocupante es que, como presidente del BCP, Cantero Sienra firmó personalmente la resolución de multa a Interfisa, a pesar de tener un claro interés directo en el asunto, lo que generó sospechas sobre su actuación. Además, alevosamente se excluyeron los años en que estuvo como gerente de la institución y se cometieron las irregularidades, lo que significó un burdo autoblanqueo.
Al mismo tiempo, Fernando Filártiga, director del BCP, quien anteriormente se había desempeñado como asesor legal de Interfisa Banco y también formó parte del equipo encargado de investigar y sancionar a la entidad, lo que ha generado críticas sobre su imparcialidad debido al claro conflicto de intereses.
La Superintendencia de Bancos, encabezada por Hernán Colmán, también ha sido objeto de cuestionamientos, ya que bajo su supervisión se han producido numerosas irregularidades y quiebras de entidades financieras.
Además, se han levantado sospechas de que Colmán habría demorado intencionalmente hasta 2022 para iniciar el sumario contra Interfisa Banco, esperando la prescripción del período correspondiente a la gestión de José Cantero.
La confianza en José Cantero y Fernando Filártiga dentro del Directorio del banco ha sido afectada, ya que habrían orquestado la multa a Interfisa, entidad de la cual ellos mismos formaron parte en el pasado.
El desafío de la nueva administración será recuperar la credibilidad de la principal banca matriz, restablecer la confianza de los ciudadanos en las instituciones financieras y garantizar una conducción transparente y ética del Banco Central del Paraguay.
La designación de Carlos Carvallo Spalding como presidente del BCP requerirá un escrutinio cuidadoso por parte del Senado, y se espera que su gestión sea capaz de enfrentar los desafíos actuales y restablecer la integridad del banco en medio del escándalo que lo ha afectado.