El canciller, Juio César Arriola, habló con legisladores sobre el tema de la hidrovía, fundamentalmente sobre el cobro de peaje sobre el río Paraná, a la altura de Santa Fe, por parte de los argentinos. La idea es ampliar el lobby con legisladores argentinos, partiendo desde el Parlasur.
La reunión se realizó en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores, esta vez, con los diputados, Katya González y Raúl Benítez, junto con sus asesores parlamentarios.
La legisladora González señaló que desde el Parlasur se definirán acciones para dar seguimiento a la solicitud paraguaya de suspender el cobro del peaje decidido por Argentina a partir de este año.
Para la primera sesión ordinaria del organismo, el 7 de agosto, se agendará una reunión con empresarios paraguayos afectados por el peaje, adelantó González.
Las autoridades de la Cancillería destacaron la importancia de mantener un acercamiento entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, a fin de coordinar acciones relativas a temas del Estado paraguayo.
Respecto a la decisión de aplicar un peaje en un tramo de la hidrovía administrado por Argentina, los demás países que comparten la vía fluvial (Paraguay, Brasil, Bolivia y Uruguay) determinaron, en la última sesión del Consejo de la Hidrovía, que las documentaciones presentadas no justifican el cobro del peaje de US$ 1,47 por tonelada de embarcación.
El pedido de suspensión fue elevado al Comité Intergubernamental de la Hidrovía (CIH) para la resolución de la controversia.
Para el Paraguay, el cobro del peaje de US$ 1,47 por tonelada de embarcación, sobre el río Paraná, representa el encarecimiento de los productos de importación y exportación. Los navieros ya hicieron sus reclamos, la Cancillería también. Como todos fracasaron, la idea es hacer lobby con políticos de Argentina, incluyendo a los parlamentarios.
