Este domingo, en un inquilinato de la ciudad de Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay, cuatro sicarios acabaron con la vida de Clemencio González, de 64 años de edad, alias ‘Gringo’, quien era catalogado por la justicia como uno de los peces gordos del narcotráfico fronterizo. En el ataque, los malvivientes utilizaron un fusil automático y dos pistolas para rematar al presunto narcotraficante con tiros cercanos y en gran cantidad, ya que los primeros reportes, aún sin confirmar, hablan de que para asegurar el objetivo, el cuerpo habría recibido 37 impactos de los cerca de 70 que se contabilizaron en el lugar donde estaba la victima.
El hombre se encontraba en la vivienda ubicada en las calles Charagua casi Panchito López, de Barrio Obrero, al oeste de la ciudad, cuando repentinamente llegaron hasta el lugar cuatro hombres portando armamento pesado, que sin mediar palabras dispararon contra la humanidad de la víctima. Por los vestigios, uno de ellos usó un fusil calibre 7.62 y otros dos pistolas calibre 9mm, contra Gringo, quien momentos antes de perder la vida, se encontraba sentado en un sofá de la casa. El cuarto hombre los aguardaba en el vehículo.
Los sicarios acribillan a Gringo y luego huyeron del lugar en el mismo vehículo, de color oscuro con el cual llegaron. El rodado fue abandonado a unos 3 kilómetros del sitio del asesinato a sangre fría y a continuación, procedieron a incinerarlo para evitar que evidencias puedan delatar a los autores del acto de sicariato.
¿Quién era Clemencio “Gringo” González?
Clemencio González Giménez nació en Horqueta, departamento de Concepción, vivió en Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay, donde estableció sus negocios. Fue un delincuente muy escurridizo que logró mantenerse con vida durante varias guerras de narcotraficantes en la frontera. Estuvo bajo las órdenes de el “Padrino”, Fahd Yamil, y con el líder del Comando Vermelho, Fernandinho Beira Mar.
Buscado desde el 2015 por varios delitos, según registros de la Policía Nacional. El fiscal antidrogas Hugo Volpe allanó su vivienda en Pedro Juan Caballero el 7 de junio de 2017 aunque testigos lo vieron por la zona, no pudieron encontrarlo. Su residencia cuenta con una capilla, que imita al diseño del Santuario de la Virgen de Caacupé, en la capital del departamento de Cordillera. Ese inmueble está deshabitado desde el 2015.
Luego de varios años prófugo, Gringo González fue capturado a mediados del 2021. Era el segundo preso más importante de todo el sistema penitenciario del país. Solo el líder del temible clan Rotela, conocido como zar del microtráfico, Armando Javier Rotela Ayala, lo superaba. A pesar del ‘rosario’ de antecedentes, ‘Gringo’ había logrado recuperar su libertad, según los datos.
En junio del 2022 la jueza Mirna Carolina Ocampos le otorgó el sobreseimiento provisional en el proceso que le seguía por el robo de cocaína.
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