Un total de 84 toneladas de marihuana fueron destruidos por la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y la Policía Federal del Brasil en una nueva fase del operativo Nueva Alianza, desarrollado esta semana en el departamento de Amambay. Calculan millones de dólares en pérdidas para el crimen organizado.
La operación 42 del operativo binacional, se centró en la destrucción de campamentos y cultivos de marihuana ilícita que ya estaba entrando en su etapa de cosecha. El volumen de lo extraído es muy importante para las autoridades que realizaron el trabajo conjunto y constituye un duro golpe a organizaciones criminales, principalmente de Brasil, país donde viaja una gran cantidad de la producción final.
Esta vez, el ataque se centro al Este del departamento, en la zona de la ciudad de Capitán Bado, quien tiene frontera con la ciudad de Coronel Sapucaia en el Estado de Mato Grosso do Sul y fue realizado gracias a la estrecha colaboración de la Policía Federal del vecino país quien tiene un convenio de cooperación con la agencia antinarcótica nacional.
Además, este mega operativo contó con la presencia de uniformados de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), la Fuerza Aérea Paraguaya (FAP) y equipos de tierra y aire de las fuerzas del orden brasileñas.
Destrucción de todo lo encontrado
Durante la semana, se procedió al desmantelamiento de 20 campamentos precarios y el corte aproximadamente 28 hectáreas de cultivos de marihuana, que bajo disposición del Ministerio Público quien acompañó el operativo, se procedió a su destrucción y quema, para evitar que las 84 toneladas vayan ser trasladadas al Brasil.
El golpe para las mafias de frontera, ronda los 2,5 millones de dólares, monto que pudo haber llegado a ser superior si la mercadería trascendía la frontera. Este tipo de operaciones se seguirán realizando para acabar con este flagelo.
