Un grupo de hombres armados, irrumpió este sábado en una estancia ubicada en el departamento de San Pedro, una pareja, compuesta por un hombre y una mujer, se identificaron como parte del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), o al menos una célula de este. Ambos, atacaron y quemaron un tractor de un establecimiento en Santa Rosa del Aguaray, además dejaron panfletos en sitio.
Según el relato de una de las víctimas, ambas personas interceptaron al personal que volvía de buscar provistas. Mientras estuvieron en poder de estas personas, exigieron información al Gobierno sobre Lichita, la hija de Carmen Villalba y Alcides Oviedo, quien según la organización terrorista, tuvo una desaparición forzosa por miembros de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC).
Si bien los trabajadores fueron liberados, esta célula les ordenó hacer llegar el mensaje a cambio de informaciones sobre el paradero de Edelio Morínigo y Oscar Denis.
Según el fiscal José Godoy Blanco, de Santa Rosa del Aguaray, en comunicación con la 1020 AM, llegaron hasta el sitio donde se dio el cruce con estas dos personas, para escuchar el testimonio de los testigos y alzar evidencias allí dejadas por estos dos supuestos miembros del EPP. A la par, miembros de las Fuerzas Armas se encuentran incursionando en el sitio a fin de asegurar el perímetro, comentó el funcionario del Ministerio Público.
El agente fiscal adelantó que por dos horas aproximadamente estuvieron retenidos fuera de su voluntad. Una de las víctimas, identificada como Wilfrido Obregón, entre lo que pudo manifestar es que divisó a dos personas con uniforme camuflado, un hombre y una mujer, poniendo a disposición sus pertenencias.
Más que eso, no pudo aportar mucho, refirió el fiscal, ya que no pudo ver los rostros y solo explicó que esta gente dejó unos panfletos que ahora ya están en manos de la fiscalía y que ahora ya lo tienen los medios de comunicación.
Confirmó plenamente que se trataría de una pareja de un hombre y una mujer, que a su retorno habían quemado un tractor perteneciente a la estancia. Si bien existe la voluntad de colaborar de parte de Obregón, este no recuerda detalles ya que fueron específicos para que no le vieran la cara, dijo el agente fiscal.
Las investigaciones continúan con la colaboración de los uniformados, tanto del departamento de Anti secuestros de la Policía Nacional, como personal militar, encerró el fiscal de Santa Rosa del Aguaray.