Aproximadamente 250 toneladas de maíz almacenadas en un silo se perdieron este jueves en la colonia Rio Verde, departamento de San Pedro cuando a razones que aún se desconocen, un silo cediera ante la presión de los miles de kilos de maíz que allí se almacenaban. Ya desde tempranas horas comenzaba a deteriorarse la estructura, por lo que hubo tiempo para una organizada evacuación.
Las desgracias en el área agrícola se siguen dando, esta vez, un desmoronamiento de un silo perteneciente a la firma Silo 7 Rio Verde S.A., en el departamento de San Pedro, comprometió el almacenamiento de aproximadamente 250 toneladas de maíz allí almacenados. Las perdidas son cuantiosas y tal vez lleven su tiempo para recuperar, manifestaron trabajadores del lugar.
Según mencionan los mismos, desde tempranas horas de la mañana del jueves, se comenzó a notar algunas fallas en la estructura del contenedor agrícola y deformaciones que hacían suponer se encontraban frente a un posible colapso. No obstante tuvieron tiempo para la correspondiente evacuación del sitio, que finalmente cedió y se perdieron los granos allí almacenados, además que el silo quedó inservible.
Si bien aún se desconocen las razones que llevaron al debilitamiento de la estructura, por experiencias en otros lugares, estos se dan por la falta de mantenimiento preventivo a las estructuras, además de sobrepasar la capacidad estática para las que fueran diseñadas estas construcciones que por lo general están hechas de metal.
El año pasado, en el mes de noviembre, un silo del molino Agrowheat SRL con dos toneladas de trigo colapsó en J. Eulogio Estigarribia (Campo 9), departamento de Caaguazú. En esa oportunidad el colapso llegó sin aviso y afortunadamente no produjo víctimas. Por suerte, este tipo de accidentes no están produciendo víctimas, pero muy cerca de Paraguay el mes pasado, un silo explotó en Brasil dejando varias víctimas fatales.
Los empresarios del campo deben realizar un constante mantenimiento de sus herramientas, para evitar que este tipo de hechos se repitan y la próxima haya víctimas que lamentar.