Varios sindicatos de trabajadores de la Municipalidad de Asunción mantienen una serie de manifestaciones exigiendo la renuncia del presidente de la Caja Municipal, Venancio Díaz Escobar, y el cese inmediato del remate de bienes de la institución jubilatoria municipal.
Al respecto, consultado por La Tribuna, Gladys Galeano, titular del Sindicato de Trabajadores de la Municipalidad de Asunción (SIMUCA), denunció que el 28 de este mes están programados los remates de inmuebles que, según los manifestantes, representan el último patrimonio que les queda a los trabajadores municipales.
Galeano afirmó que la administración de la Caja decidió vender estas propiedades como parte de maniobras políticas y económicas en favor de sectores afines, a pesar de la anulación de las elecciones internas de 2019 y la falta de legitimidad de sus actuales administradores.
Además, señaló que Díaz Escobar, actúa con el respaldo de políticos de turno y que incluso se bloquea el acceso de los trabajadores a las instalaciones de la Caja.
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Hay bienes municipales en riesgo
La Caja pone en riesgo de remate una sede en Ciudad del Este, cuatro departamentos en Encarnación y un inmueble sobre la calle Última en Asunción.
Galeano denunció que la administración ofrece estos bienes a precios irrisorios a personas cercanas, lo que perjudica a los trabajadores que aportaron a la Caja.
Tres sindicatos —SIMUCA, Sitrama y SINOEMA— convocaron la protesta, que recibió el apoyo de unos 2.000 funcionarios. En la mañana del miércoles, los manifestantes no solo exigieron frenar el remate, sino que también rechazaron una ley aprobada en diciembre, la cual, según ellos, perjudica aún más a los trabajadores municipales.
Galeano adelantó que esta será la primera de muchas movilizaciones y advirtió que no detendrán su lucha hasta lograr la renuncia de todos los administradores de la Caja.
Legalidad del remate
En cuanto a la legalidad del remate, explicó que los trabajadores solicitaron un amparo judicial para evitar la venta de los bienes, pero la jueza de primera instancia lo rechazó. Denunció que el Poder Judicial está controlado por políticos vinculados a la Caja, permitiendo que se ignoren las denuncias sobre desfalcos millonarios.
Los manifestantes recuerdan que la Contraloría General de la República había detectado en su momento un faltante de 35.000 millones de guaraníes en la Caja, cifra que con el tiempo se elevó a 279.000 millones de guaraníes.
Además, señalaron que existen pruebas de falsificación de documentos para retirar aportes jubilatorios, sin que hasta el momento haya personas procesadas o detenidas por estos hechos.
Los trabajadores también cuestionaron la falta de intervención estatal a pesar de las denuncias de corrupción.
Fondos malversados
Galeano criticó que, en vez de recuperar los fondos malversados, la actual administración de la Caja busca rematar propiedades para seguir operando con normalidad.
Para los manifestantes, el objetivo del remate no es sanear la institución, sino continuar beneficiando a grupos políticos y personales con préstamos irregulares.
La movilización reunió a más de 2.000 personas que marcharon desde la sede de El Jurado de Enjuiciamiento de magistrados, hasta la Caja de Jubilados Municipales. En el primer punto, estuvieron exigiendo que los jueces responsables puedan frenar las investigaciones y a la par sean investigados por encubrimiento.
Los trabajadores adelantaron que seguirán con las protestas y denunciarán a nivel nacional e internacional el manejo de la Caja Municipal, en lo que calificaron como uno de los mayores desfalcos en la historia de los fondos jubilatorios de Paraguay.
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