En la mañana de este jueves, la jueza de Ejecución Penal, Sandra Kirchhofer, hizo lugar a la aplicación de pena unitaria contra Armando Javier Rotela que fue condenado en dos procesos judiciales. Las causas por cuales fue condenado, incluyen posesión y tráfico de drogas, además de posesión y comercialización de drogas peligrosas y posesión de armas de fuego.
La primera condena de Rotela data de marzo de 2020, fecha que fue sentenciado a 19 años más 8 años por medidas de seguridad, entre tanto, el Tribunal Colegiado de Paraguarí, lo condenó en enero de 2021 a 8 años.
Con la unificación de condenas, Rotela cumplirá la totalidad de las penas el 23 de julio de 2038; mientras que la mitad la cumplirá el 23 de enero de 2027 y podrá solicitar la libertad condicional a partir del 23 de noviembre de 2030.
Aparte de las penas, la magistrada estableció ocho años de medidas de seguridad que se cumplirán «a partir del 23 de julio de 2038». Las medidas judiciales, cuyo control estará a cargo del Juzgado de Ejecución Penal, se sumarán a las penas, por lo que el castigo contra Javier Rotela va hasta el 2046.
La primera condena se produjo en el 2011 y fue en el expediente: «Armando Javier Rotela Ayala s/ posesión y tráfico de drogas y la segunda condena se dictó en el 2016 y fue en el expediente «Armando Javier Rotela Ayala s/ posesión y comercialización de drogas y posesión de armas de fuego».
Lo que dice el fallo:
Revuelta en Tacumbú
A finales del año pasado, Armado Javier Rotela, líder del Clan Rotela en las cárceles, fue trasladado a la penitenciaría de Viñas Cue. Según las autoridades, Rotela organizó una revuelta en Tacumbú, incendió la cárcel y se amotinó con su gente no permitiendo el acceso de los policías.
Sin embargo, el Ministerio de Justicia preparó el Operativo Veneratio, el mayor despliegue militar y policial de los últimos tiempos, para capturar a Rotela. El temible líder de la banda fue capturado y trasladado a la prisión militar de Viñas Cue. El «pabellón vip» que pertenecía al grupo criminal había sido intervenido.
Al más puro estilo del presidente salvadoreño Nayib Bukele, el impresionante despliegue llevado a cabo de manera sorpresiva en la mañana del 18 de diciembre, se logró dar con el objetivo principal: Armando Javier Rotela, de quien se decía que tenía el «control» de la principal penitenciaría del país.
Luego de un enfrentamiento que dejó un policía fallecido y varios heridos, finalmente Rotela se rindió y se puso a disposición de los agentes quienes encapuchado lo llevaron hasta la prisión de Viñas Cue. Luego de este hecho, muchos internos fueron trasladándose hacia otras penitenciarías del país.
Rotela actualmente está en la Penitenciaría de Emboscada y tiene un tercer caso pendiente por motín, asociación criminal y transgresión a la Ley de Armas, por el operativo Veneratio.
