Con controles en aguas territoriales y compartidas con países vecinos, la Policía Nacional y el Ministerio Público se encuentran haciendo valer la veda pesquera que inició en la víspera y se extiende hasta diciembre en aguas compartidas con Argentina y fines de enero con aguas compartidas con Brasil.
Por un mes y medio a partir del 1 de noviembre rige la veda de pesca en los ríos Paraná, Pilcomayo y Paraguay, en donde nuestro país limita con la República Argentina hasta el 15 de diciembre. Mientras que sobre el Paraguay, Apa, arroyo Estrella y río Paraná donde tenemos límites con el Brasil, la veda será de casi tres meses hasta el 31 de enero de 2023.
Sobre el inicio de los controles, el fiscal Augusto Salas de la unidad de Delitos Ambientales de la Fiscalía que estarán atentos a los posibles infractores que podrán tener penas de hasta cinco años de cárcel, en el caso de ser encontrados en flagrancia.
La protección del ciclo de reproducción de la fauna hídrica es la prioridad para el Ministerio Público y en especial cuando estas se encuentran en el periodo de ovulación que se da en coincidencia con la veda pesquera.
Salas recordó que grandes cauces hídricos así como lagos y lagunas nacionales se incluyen en las zonas vigiladas como los ríos Jejuy y el Tebycuary, además de los que se encuentran en el Chaco paraguayo.
La aplicación de penas se dará a los infractores que realicen no sólo pesca comercial, sino que también a la pesca deportiva y sólo realizarán excepciones con aquellos que practiquen la pesca de subsistencia para ciudadanos que viven en costas o riberas.