Según un Tribunal de Apelaciones, no vale la absolución de Dany Durand en juico por declaración falsa. El Tribunal anuló el fallo de primera instancia y Durand tendrá que someterse a un nuevo juicio oral y público, según la resolución. Su abogado defensor, Oscar Tuma, anunció que recurrirá a la Corte Suprema de Justicia.
La sentencia que surgió de primera instancia estaba mal hecha. Entonces, los fiscales Natalia Fúster y Néstor Coronel apelaron el fallo. Ahora, el Tribunal de Apelación da la razón a los citados agentes.
Agustín Lovera Cañete, Cristóbal Sánchez y José Waldir Servín fueron los integrantes del Tribunal de Apelaciones. La resolución dice que en primera instancia, los jueces sólo trascribieron normas legales y constitucionales; no fundamentaron por qué absolvieron a Durand. Aparte de citar leyes, tenían que relatar hechos que ameritan la absolución; pero no ocurrió.
Los jueces deben consignar y registrar las razones que les lleva tener por comprobadas o no las hipótesis fácticas de las partes con base en las pruebas aportadas y deben ser debidamente valoradas, la motivación de los jueces sobre las pruebas de cargo y de descargo debe ser de forma expresa, completa, exhaustiva, simple y lineal, cosa que no ocurrió en el fallo anulado, según la resolución del Tribunal de Apelaciones.
Lo que hicieron en primera instancia es expresar que “oídas las declaraciones de los testigos, producidas las pruebas, las circunstancias fáticas han sido analizadas a la luz de los requisitos del tipo legal, declaración falsa y, que al respecto han concluido que la conducta atribuida al acusado Dany Durand no reúne los requisitos suficientes para subsumir la conducta del mismo sin especificar cuál, o cuáles pruebas les ha otorgado mayor o menor valor probatorio” dice otra parte del fallo del Tribunal de Apelaciones.
El 3 de febrero del 2023, la fiscalía imputó a Durand por declaración falsa; porque incluyó en sus declaraciones juradas propiedades afectadas en el juicio de quiebra de la firma Mocipar.
La declaración jurada de Durand, según el relato de la Fiscalía, dice que el ex ministro adquirió en 1994 la finca 9176, situada en Ypacaraí, por un valor de G. 1.030 millones, pero dicha propiedad figura como activo dentro del juicio de Mocipar Propiedades SA, empresa declarada en quiebra.
Aparte, Durand incluyó -según la acusación- cuatro rodados como propiedad suyas. Sin embargo, tres de ellos están registrados a nombre de la empresa Durand Propiedades S.A. y la última nuevamente a nombre de Mocipar.
En el expediente figuran créditos o deudas mal declaradas, según la Fiscalía; pero el Tribunal de Sentencia, de primera instancia, pasó de largo. Por estos y otros fundamentos, el Tribunal de Apelaciones ordenó que se haga de nuevo un juicio oral, en primera instancia.
Sin embargo, el abogado Oscart Tuma, defendor de Durand, anunció que promoverá una acción de inconstitucionalidad contra el fallo del Tribunal de Apelaciones, porque actualmente mucha gente rectifica su declaración jurada sin inconvenientes y Durand había rectificado en tiempo y forma. Sin embargo, él está procesado, señaló.
