El caso de Jessica Duarte Scappini, ha dejado en evidencia una vez más las terribles consecuencias de la violencia de género en Paraguay. Según manifestó el abogado Víctor Casanova, el caso de Jessica representó un claro ejemplo de manipulación extrema, donde la víctima, a lo largo del tiempo, terminó justificando los maltratos recibidos por parte de quien sería el agresor, Miguel Sánchez.
Casanova, especialista en violencia familiar y de género y representante legal de la familia, en entrevista con la 1020 AM, afirmó que en situaciones como esta, las mujeres suelen callar y soportar el maltrato, lo que muchas veces desemboca en tragedias que pudieron haberse evitado.
El ingreso al hospital de Duarte Scappini
Dijo que Jessica Duarte ingresó al hospital de trauma con múltiples golpes en el cuerpo, pero al principio no quiso admitir que la habían agredido. Sin embargo, tras varias horas, relató la situación que vivió la noche en que ocurrió la tragedia.
Durante la investigación, se encontraron testigos clave que afirmaron haber presenciado cómo Sánchez la hostigó y la agredió en público, antes de llevarla a su casa, donde se produjo el fatal desenlace.
Investigación
Los testimonios recopilados por la Fiscalía señalaron que Jessica había estado en un bar la noche de los hechos, y varias personas presentes en el lugar, incluidos mozos y clientes, confirmaron que vieron a Miguel Sánchez ingresar al establecimiento y comenzar a hostigar a Jessica.
Se supo que, a pesar de las advertencias de una amiga para que abandonara el lugar, Jessica decidió quedarse. Minutos después, Sánchez salió del bar y permaneció afuera, llamándola y esperándola por casi 40 minutos.
Las imágenes captadas por las cámaras de seguridad mostraron cómo Sánchez la arrastró violentamente. Varios testigos declararon que alguien levantó a Jessica del cabello en más de una ocasión, y ella cayó varias veces al suelo, lo que le causó diversas lesiones, incluida una fisura en la muñeca.
No fue caída accidental
El abogado Casanova afirmó que, aunque la defensa intentó alegar que las lesiones de Jessica se debieron a una caída accidental, pronto descartaron esa versión. Además, los testigos del bar, proporcionaron detalles que contradecían la versión del acusado, y las imágenes obtenidas confirmaron los hechos de violencia.
Finalmente ratificó que, ambos salieron del bar y se dirigieron al domicilio de Sánchez. Las cámaras de seguridad del trayecto captaron movimientos extraños en el vehículo, lo que sugirió que, en el camino, pudo haber ocurrido más violencia dentro del auto.
Lamentablemente, Jessica Duarte perdió la vida tras esa noche, y las pruebas forenses posteriores revelaron que los golpes y lesiones que sufrió fueron la causa principal de su muerte.
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