Santiago (agencias). La población electoral chilena fue este domingo a las urnas para aprobar o rechazar la nueva Carta Magna preparada por la Comisión Constituyente y que tenía el apoyo del presidente Gabriel Boric. El “Rechazo” estaba en bocas de la mayoría, sin embargo como adelantaban desde el gobierno trasandino, en caso de que se de el hipotético escenario como el de la víspera, se volvería a plantear una nueva asamblea constituyente para reemplazar la actual que data de los tiempos de Augusto Pinochet.
Finalmente ocurrió como las encuestas vaticinaban, el borrador de Ley Suprema en Chile fue rechazado en el referéndum planteado este domingo 4 de setiembre a la población a fin de saber si este era o no implementado en el territorio. El margen fue abismal, con e 99,4% de excrutinio, ganó el rechazado por 62% del total de votos contra apenas el 38% quien creyó que el resultado de un año sobre el trabajo de los constituyentes, podría regir la prelación de leyes trasandinas.
Pese al festejo de la mayoría electoral, no será la decisión definitiva ya que el presidente Boric, anunciaba que otro proceso constituyente será impulsado por su Gobierno, fuerzas políticas y sociales que aborden juntos y unidos a una Constitución Nacional de cara al futuro.
Me comprometo en poner todo de mi parte para construir en conjunto con el Congreso y la Sociedad Civil, un nuevo itinerario constituyente, afirmó el mandatario chileno luego de aceptar la voluntad popular demostrada al final del día de las elecciones.
Afirmó que el proceso ya iniciará hoy lunes en el Palacio de la Moneda, se del Gobierno de Chile, citando a las principales autoridades del Congreso y la sociedad civil, para intentar trazar nuevos caminos que deriven a otra Asamblea Nacional Constituyente, que por segunda vez hará un bosquejo de la Carta Magna definitiva que sea del agrado de la población en general.
La actual Constitución Nacional de Chile, fue aprobada el 8 de agosto del 1980, poco más de un mes después, el 11 de setiembre fue ratificada para ser promulgada desde el 21 de octubre de ese mismo año. Recién entró en vigor el 11 de marzo de 1981, en el Gobierno de Augusto Pinochet Ugarte.
