La prensa de Bolivia destaca la preocupante situación por la falta de caudal del río Pilcomayo en la zona que sirve tanto a ese país como a Paraguay y Argentina. La falta de agua suficiencia para llenar el caudal traería problemas para el relleno de napas freáticas y la vida silvestre de la zona debido a que además se está rápidamente salinizando, denuncian.
Medios bolivianos como “El País” se hacen eco de la situación en el curso del Pilcomayo, un problema natural que a la larga podría afectarnos puesto que el flujo de las aguas del río en común se desacelera y de a poco deja de ingresar a su vez a la Argentina y al Paraguay a la altura de Santa Teresa donde está la embocadura.
Anteriormente no se daba este tipo de corte abrupto de ingreso del caudal y es la primera vez que esto pasa, marcando un precedente histórico por no haber registros hidrométricos anteriores.
Las autoridades de gestión e investigación del vecino país confirman que la falta de ingreso de agua y de la irrupción del flujo es algo histórico. El registro más bajo en Misión La Paz, que es la estación de aforo que existe en Argentina, marca un caudal inferior a los dos metros por segundo lo que para un río como el Pilcomayo “no es nada”.
Aducen que no es una cuestión de obras y sus respectivos mantenimientos aunque sí es por falta de agua efectiva en la cuenca. Esperan que en las próximas semanas se puedan presentar lluvias en Bolivia y así se comience a tener la fuerza normal para mover las aguas.
De no ingresar con fuerza, las aguas del Pilcomayo al Paraguay, esto afectará fuertemente a los pobladores del bajo Chaco hasta donde llegan las principales riadas a nuestro país. Según advierten, la salinización es un problema que se deberá pasar en caso que afecte en mayor medida a esta zona del país.