Ante la necesidad de renovar la vida útil de la actual flota de aviones de defensa que cuenta la Fuerza Aérea Paraguaya (FAP), nuestro país ya está a tiempo de prever una renovación de sus aeronaves de ataque a tierra. El Embraer Súper Tucano, sigue siendo una de las mejores opciones para nuestro medio, según la opinión del historiador Antonio Luis Sapienza.
Sapienza es un entusiasta aeronáutico y habló sobre las diferencias entre el Tucano y el Súper Tucano. Según el experto, el Tucano es de una aeronave de ataque que comenzó a ser fabricada a mediados de los años 80 y se dejó de fabricar a principios de los años 2000. Fue un éxito de exportación numerosos países han operado y siguen operando el Tucano,
Paraguay comenzó a usar este tipo de equipos en 1987, es básicamente una aeronave de ataque a tierra, no es un caza, pero puede llevar armamento convencional a decir: coheteras, bombas y pots de ametralladora bajo las alas. Desde el 2003 es el único tipo de avión de combate que cuenta el país.
Súper Tucano
Mientras que Súper Tucano es una aeronave, con un paso superior al Tucano, ya viene con sistemas avanzados de navegación y y de ataque y puede llevar muchísimo más armamentos que un Tucano simple. El Súper Tucáno, puede llevar misiles aire, misiles aire tierra, además llevar bombas convencionales, así como llevar bombas inteligentes e incluso las guiadas por láser por medio del sistema que se llama FL RT y tal como su antecesor, puede llevar coheteras y tanques auxiliares de combustible para expandir su radio de acción.
Según Sapienza, en cuanto a la aviónica, o sea, la instrumentación de la cabina es totalmente digital y es muy parecida a la de un F 16. Es una nave, que se empezó a fabricar a mediados de la primera década de este siglo 21 y se sigue fabricando y exportando con muchísimo éxito.
En ambas aeronaves, tanto el Tucano como el Súper Tucano, son aeronaves propulsados por un motor PT6, turbo hélice, porque justamente su su función principal es ataque tierra, interceptación y apoyo aéreo cercano a tropas terrestres, además de bombardero ligero. Hay que aclarar que ninguno de los dos son cazas de combate, por eso es T27 en el Tucano y A29 en el caso del Súper Tucano, explicó.
¿Convendría traer un Jet o los turbo hélices?
Para lo que se busca, el Súper Tucano es lo mejor, según Sapienza, porque es un equipo de interceptación para aeronaves que no se identifican al entrar al espacio aéreo paraguayo, o sea, aquellos vuelos ilegales que pueden ser tanto de contrabando, como de narcotráfico.
Un jet de combate primero es más caro de adquirir, más caro de mantener y más caro de operar, según el experto. Entonces si bien las FAP consideró algunos modelos haciendo números, se llegó a la conclusión de que es imposible o muy difícil poder adquirir jets de combate. Así que por eso se optó por una aeronave turbo hélice con una buena capacidad de interceptación y una buena capacidad de armas.
¿Es tiempo de renovar la flota de aviones de defensa de la FAP?
Sapienza sostiene que ya es imperiosa la necesidad de adquisición de nuevas aeronaves, porque Paraguay no ha adquirido aeronaves de combate nuevas desde 1987, año en que adquirió los primeros Tucanos o sea, en 37 años Paraguay no ha renovado su flota de aviones de combate. Esos Tucanos que siguen volando están al borde de su vida útil.
«Por ello este paquete de 121 millones de dólares es importante, porque no solamente va, se va a adquirir Súper Tucanos nuevos», insistió Sapienza, aclarando que no son usados, son aviones nuevos.
Explicó que el paquete de compra incluiría el entrenamiento más simulador de vuelo, un hangar más todo el sistema de armas que mencioné. Adicionalmente, ese paquete incluye la revitalización de los seis Tucanos viejos, «lo que va a implicar, digamos una renovación total, inclusive el cambio de los de la instrumentación analógica a la digital y por ese paquete, vamos a tener, no, 6 sino 12 aeronaves de las seis nuevas y seis totalmente, revitalizadas a cero kilómetro», remarcó.
«Me gustaría mencionar a su vez, que normalmente en los países con visión de futuro, lo que se hace es cuando se va a pasar a retiro un determinado tipo aeronave, ya sea por cuestiones presupuestarias o por cuestiones de de la edad de la aeronave, como lo que ocurrió con nuestra FAP cuando se pasó a retiro, los últimos Xavantes en el año 2003 que estaban en servicio, primero lo anticipan para conseguir su remplazo», sostuvo.
En su tiempo, ¿buscar un reemplazo para el retiro de aeronaves?
Señaló también que eso se hizo es un su momento y y pasaron más de 20 años. «Nunca es un momento oportuno. Simplemente se da una decisión política de adquirir estas aeronaves, porque la FAP necesita por misión constitucional resguardar el espacio aéreo y la soberanía aérea del país» remarcó.
Finalmente dijo que esos 121 millones de dólares por lo que abarca, es muy ventajoso para para el Paraguay. «Sinceramente, es muy ventajoso, de verdad por todo un poco por todo lo que trae de ventaja y no solamente la compra de aeronaves viejas en comparación con lo ocurrido con ofertas a otros países», apuntó.