El barrio Valle Pucú, de la ciudad de Areguá, capital del departamento Central, este domingo estuvo de fiesta. Como todos los 24 de setiembre, tienen dos motivos para festejar y son, en primer lugar el aniversario del club de fútbol homónimo a la fecha y la festividad de su santa patrona, la virgen de la Merced (Mercedes), y en cuyo honor mantiene una tradición que ya poco se practica en Paraguay.
En entrevista con La Tribuna, el periodista, Neri Insfrán Rojas, describe a esta fecha como una de las únicas fiestas patronales que mantiene la tradición del auténtico “Karu guazú”, que, a diferencia de otras similares en el país, en Valle Pucú, las familias mantienen aún la costumbre de servir un almuerzo a quien desee compartir con cualquier vecino, con un plato de almuerzo especial.
Entorno a la mesa
Como el mismo colega nos describe, el 24 de setiembre, es una fecha de mucho sentimiento en nuestro barrio, es el día de la santa patrona, la Virgen de las Mercedes y a su vez este año festejamos los 109 años del club 24 de setiembre, club que actualmente juega en la división intermedia de la Asociación Paraguaya de Fútbol.
El comunicador destaca que en Valle Pucú, se rescata aún la tradición del auténtico “Karú Guazú”, que si bien en Paraguay hay muchos eventos similares, este sería tal vez el único que este fecha, se festeja casa por casa. Nosotros no festejamos en un lugar específico, sino más bien, cada familia prepara un menú para dar de comer a sus invitados, explicó Insfrán.
Con un semblante de orgullo, explicó que esta tradición se mantiene hace 150 años aproximadamente, cuando los pobladores de aquel lejano paraje, a orillas del arroyo Yukury en honor a su santa patrona, comenzaron con una práctica que se pasó de generación en generación y hoy día, prácticamente la mitad del barrio mantiene esa costumbre de ofrecer un plato bien servido a sus comensales.
En cuanto al menú que sirven en esta fecha especial, mencionó que en casi todas las mesas del barrio aregueño, se sirve un menú parecido. No puede faltar la sopa, chancho, un poco de carne vacuna a la parrilla, embutidos y ensaladas. La tradición obliga a las familias anfitrionas a invitar a almorzar sin ningún costo, recordó.
Finalmente mencionó que pese a que el barrio creció bastante en estos últimos tiempos, al menos el 50% de las familias aún traducen esta costumbre legada por abuelos y ancestros de varias generaciones. Estamos hablando de una tradición que da de comer fácilmente en cada mediodía del 24 de setiembre a unas 10.000 a 12.000 personas que visitan las casas anfitrionas cada año, mencionó finalmente el entrevistado.
Valle Pucú es el primer barrio ubicado a la entrada de la ciudad de Areguá, para ingresar aquí se pasa el puente que divide la ciudad con Luque y en la primera curva hacia la mano izquierda se entra y ya se puede divisar los arreglos patronales, así como las mesas servidas para quienes llegan en honor a la santa patrona, la Virgen de las Mercedes.
Una obra que describe a Valle Pucú
Insfrán describe esta misma tradición en su libro “Valle Pucú mi Pueblo”, un libro que contiene historias que datan desde cuando la zona recibía el nombre “de las Salinas”, en las márgenes del arroyo Yukyry, que actualmente hace de límite natural entre los municipios de Areguá y Luque.
El autor narra de forma apasionada, muchos detalles que invitan a descubrir un barrio con tradición e historia, desde sus inicios, su cultura, su fe por la Virgen de las Mercedes y sin descuidar el fanatismo por el Club 24 de setiembre, actualmente en la intermedia del fútbol paraguayo y del cual muchos fanáticos visten la “franjeada”, que es orgullo indiscutible de este barrio de Areguá.