El tercer domingo de junio de cada año se celebra el día de nuestros padres. La figura paterna representa históricamente el sostén familiar, aunque en las últimas décadas la figura paterna parece haber adquirido un matiz más amoroso y cercano a los hijos y su desarrollo emocional. Sin duda, este domingo es una ocasión para reflexionar sobre el papel fundamental de los padres en la sociedad. Más allá de las celebraciones en sí, este día nos invita a valorar y reconocer la influencia de los padres en la formación de valores, el desarrollo emocional y el bienestar general de sus hijos.
En una cultura donde las madres a menudo reciben mayor protagonismo por su importantísimo papel en la crianza, es crucial reivindicar la figura paterna. Hoy, los padres no solo aportan en sentido económico, sino también emocional, proporcionando un modelo a seguir en términos de disciplina, responsabilidad y afecto. La presencia activa y comprometida de los padres es esencial para el equilibrio familiar y el desarrollo integral de los niños.
En Paraguay, donde las estructuras familiares pueden ser diversas y los desafíos socioeconómicos significativos, los padres enfrentan numerosas responsabilidades. Sin embargo, muchos logran superar las dificultades, demostrando un compromiso inquebrantable con el bienestar de sus familias. Este esfuerzo merece reconocimiento y celebración, no solo un día al año, sino de manera constante. Día a día padres paraguayos curten su piel de sol a sol para abastecer suficientemente a aquellos que más ama en el mundo. Muchos, a pesar del cansancio luego de la jornada laboral aún reservan fuerzas para brindar momentos de diversión a sus niños, hacer tareas, o simplemente compartir momentos antes de que culmine el día e inicien los preparativos para otro arduo día de trabajo.
En estos días es sensible el cambio que ha experimentado la figura paterna, pues en muchos casos ha incorporado la equidad en las responsabilidades familiares, participando activamente en la crianza y educación de sus hijos. La paternidad responsable y afectuosa contribuye a la creación de una sociedad más justa y equitativa, donde los roles tradicionales se redefinen para beneficiar a todos los miembros de la familia.
Los padres, mayoritariamente son conscientes de sus limitaciones, pero esto no les resta ánimo para fungir de héroes de sus hijos todos los días, sin descanso. Si eres padre, valora la ocasión de poder disfrutar este día con tus hijos, quienes ven en ti mucho más de lo que crees. Si eres hijo, valora la oportunidad de poder brindar un día más con el hombre que lo ha dado todo por ti y comprende sus errores. Después de todo, los niños se hacen hombres cuando perdonan los pecados de sus padres. Feliz día viejo!