En las últimas décadas, el crecimiento urbano en Paraguay ha sido un fenómeno impresionante, pero lamentablemente, este crecimiento se da en la mayoría de los casos de forma desordenada y no planificada. La expansión desordenada de las ciudades ha sido evidente, con un énfasis insuficiente en la seguridad de las edificaciones. La reciente tragedia en el edificio Flytec de Ciudad del Este, donde un incendio consumió el lugar durante cinco largos días, sirve como un recordatorio urgente de la necesidad de abordar este problema de frente.
El incidente, aunque no cobró víctimas humanas, puso al descubierto fallas alarmantes en las medidas de seguridad de la edificación. Obreros quedaron atrapados en los pisos superiores, destacando la ausencia de salidas de emergencia y bocas de incendio. Los bomberos, valientes en su labor, se vieron obstaculizados en su rescate por la falta de mecanismos para acceder a los niveles superiores, revelando una deficiencia crítica en la planificación de la infraestructura.
Paraguay, ya marcado por la tragedia en Ykua Bolaños que cobró la vida de 400 personas, parece no haber aprendido completamente de ese desafortunado suceso. La capital del Alto Paraná, en particular, alberga galerías con instalaciones eléctricas precarias, abarrotadas de trabajadores y depósitos, creando un caldo de cultivo para posibles desastres.
Es imperativo que las autoridades tomen medidas proactivas para evitar tragedias futuras. La Fiscalía ha iniciado investigaciones sobre el incendio en el edificio Flytec, solicitando documentación esencial sobre la construcción y la propiedad. Sin embargo, este debería ser solo el comienzo de una acción más amplia.
La Municipalidad de Ciudad del Este debe liderar una campaña robusta para regularizar la situación de los edificios en la ciudad. La seguridad estructural y la implementación de protocolos de emergencia deben ser prioritarias en la planificación urbana. La suerte no puede ser un sustituto de la prevención.
Este incidente debe ser un llamado de alerta, no solo para Ciudad del Este, sino para todas las ciudades paraguayas que enfrentan un crecimiento rápido pero desordenado. La seguridad no puede ser sacrificada en aras del desarrollo. La ecología urbana debe incluir la seguridad como parte integral de su planificación. El precio de la negligencia en este aspecto puede ser demasiado alto. La tragedia en Ykua Bolaños ya nos ha recordado esa amarga lección. Ahora, es el momento de aprender y actuar antes de que sea demasiado tarde.