Algo esta cambiando. Diciembre del año 2023 podría ser un mes que pase a la historia como el mes en el que se dieron certeros golpes para empezar con el pie derecho una batalla frontal sin precedentes contra el crimen organizado en nuestro país: Primeramente el Operativo Dakovo atestó un mazazo a una de las estructuras regionales más importantes del tráfico de armas, un crimen transnacional que mueve miles de millones de dólares al igual que el narcotráfico. Esperamos que pronto se de con el paradero de Diego Dirísio, pero sin lugar a dudas, el grupo Primer Comando de la Capital (PCC) queda sin una importante pieza.

Luego vendría el certero puñetazo al hígado, de aquellos que en el lenguaje pugilístico dejan «Knock Out»: El Operativo Veneratio.
Nadie se esperaba que en cuestión de una mañana, el Estado paraguayo ejercería su legítima soberanía en la que en un documental de Netflix fuera tristemente catalogada de «la peor prisión del mundo».

Las imágenes de un Rotela esposado y desconcertado y de cientos de reos que servían a su nauseabunda estructura criminal siendo trasladados al más puro estilo del mandatario salvadoreño Nayib Bukele, sientan un inédito precedente quiérase o no.

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Hasta la opositora más férrea al gobierno actual calificó de «golazo» el mega operativo. Sobran palabras.

Lo que esta mal, se debe criticar y lo que esta bien se debe valorar y aplaudir.

Esperamos que esto sea el inicio de un combate efectivo y de un cambio real. Ya lo decíamos en un anterior editorial y lo reiteramos con cada vez más fuerza: Paraguay debe dejar de ser tierra de nadie si quiere volver a brillar en el concierto de las naciones.