No son unos encuentros nomás las reuniones anti corrupción que se harán en Washington entre el 6 y 10 de diciembre próximo. Aunque es posible que no haya una posición final sobre Paraguay, son elementos de observaciones más que suman dentro de la Agenda del presidente Joe Biden en su política global contra la corrupción. Estará presente Richard Nephew, principal operador de los Estados Unidos para enfrentar el flagelo, y quien estuvo recientemente de visita oficial en Paraguay.
De acuerdo a informaciones pre liminares, el ministro anticorrupción, Federico Hetter, será igualmente parte de las deliberaciones. Incluso, está previsto una reunión con Nephew. El representante nacional tiene que ir bien preparado y entender, por sobre todo, que los Estados Unidos saben mucho más, a veces, de las informaciones oficiales que recibe. Ante eso, la objetividad e imparcialidad son claves para ganar crédito en el cónclave internacional.
Recordemos que el propio Richard Nephew ratificó durante su visita a Asunción que EEUU tomará las medidas que sean necesarias contra la corrupción. Su país considera que la corrupción cobija el crimen organizado y eso, al vincularse con el lavado de dinero, representa un serio peligro para la seguridad de los estadounidenses.
El representante del gobierno nacional debe saber leer que esos encuentros del 6 al 10 de diciembre son parte de una cadenas de sucesos que tiene en agenda el Gobierno de los Estados Unidos. También son oportunidades para proyectar acuerdos sobre asistencia para transparentar toda la gestión pública de modo a ampliar el espectro de éxito en la lucha contra la corrupción.
Las consignas de políticas anticorrupción de los Estados Unidos abarcan la integridad de los funcionarios y la transparencia en el manejo de las cosas públicas. Un pilar crucial representa la rendición de cuentas, que debe hacer todo poder que toma decisiones y administra dinero del pueblo.
Cabe recordar que EEUU declaró significativamente corrupto al ex presidente de la República Horacio Cartes, que se hizo muy distante de las internas coloradas previstas para el 18 de diciembre, por lo que habría que ver sí afectó o no su chance por la presidencia de la Junta de Gobierno. Igual calificación recibió al actual vicepresidente Hugo Velázquez, quien dejó su precandidatura a la Presidencia de la República, pero continúa como segundo en el Poder Ejecutivo.
Los Estados Unidos son severos con el tiempo, la forma y, principalmente, en el manejo de la información y el éxito de las gestiones. Es que Washington apunta a una lucha integral contra la corrupción, no de manera sectaria, discriminatoria, donde en verdad eso de «caiga quien caiga» es una realidad y no sólo una promesa de campaña.