El director de Itaipu, lado brasileño, Enio Verri, consideró que la discordia que actualmente existe en las negociaciones entre Paraguay y Brasil, sobre la binacional es la mayor que nunca. «La discordia es mayor que nunca», afirmó en diálogo con los periodistas. A pesar de ello, Verri cree que en el mes de febrero se puede lograr un acercamiento de los intereses de ambos países.
«La energía de calidad y asequible es inclusión social para que las personas puedan tener energía en sus hogares y puedan pagar sus facturas de luz. No podemos permitirnos tener una energía costosa. Nuestra discrepancia es que Paraguay, en lugar de reducir el precio de la energía porque ya no tenemos deudas, quiere aumentar el precio. Nosotros pensamos que no es justo, el presidente Lula también cree que no es justo», destacó Verri.
Verri, habló públicamente por primera vez sobre la situación de impasse entre Brasil y Paraguay en las negociaciones sobre la energía excedente de la binacional. Para Verri, la discordia es la mayor en 50 años.
Actualmente, Brasil paga $16,71 por kilovatio (KW). Sin embargo, Paraguay pretende aumentar a $20,75, alrededor de un 25% más, lo que generaría un aumento en las tarifas para los brasileños, algo que Brasil quiere evitar. En los bastidores, la situación se considera una crisis diplomática, publica el periódico foz.portaldacidade.com
El periódico informó que para presionar a Brasil en las negociaciones, Paraguay ha bloqueado el presupuesto de Itaipú desde finales del año pasado. Los salarios de los empleados, tanto brasileños como paraguayos, se retrasaron a finales del año pasado y a principios de este año.
Sin embargo, el lado brasileño realizó los pagos después de una decisión judicial. Basados en la decisión judicial que ordenó el pago de los salarios de los brasileños, a través de una nota enviada al Director General Paraguayo, los sindicatos pidieron un trato igualitario y los trabajadores del país vecino también recibieron sus salarios, agrega la publicación.
«Desafortunadamente, Paraguay eligió radicalizar en lugar de seguir la vida normal de la empresa y construir un acuerdo como ya se hizo antes», criticó el director brasileño. «La discordia es mayor que nunca», agregó Verri.
Verri cree que el impasse debería resolverse aún en febrero. «La hidroeléctrica es la principal fuente generadora de recursos para las arcas públicas del país vecino. Es obvio que van a necesitar esos recursos, como nosotros necesitamos, y creo que en el mes de febrero todo estará resuelto y las inversiones avanzarán normalmente», proyectó el director brasileño.
El contrato de Itaipú establece que Brasil y Paraguay deben dividir la energía producida en un 50% para cada lado. El país vecino (Paraguay) utiliza solo el 17% de lo que produce, y el resto lo vende a Brasil, el único comprador posible según las reglas vigentes. Sin embargo, el presidente paraguayo, Santiago Peña, quiere cambiar esta regla en el nuevo acuerdo. Quiere que el país pueda negociar con quien ofrezca el mejor precio, informó foz.portaldacidade.com