Richard Nephew, Coordinador Global Anticorrupción, puesto en el cargo por el propio secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, estará la otra semana por Asunción. Su presencia moverá todo tipo de especulaciones, sin embargo, lo claro es la tarea que tiene: La lucha contra la corrupción, rendición de cuentas y la seguridad. El funcionario es una persona con alta capacitación y mucha experiencia.
Antony Blinken había dicho en un comunicado publicado por la Casa Blanca que el nombramiento de Nephew demostraba la importancia que Estados Unidos otorga a la lucha contra la corrupción como un interés central de la seguridad nacional y reiteró esa vez el papel central que desempeñan las alianzas mundiales en esta lucha.
Nephew ocupa un rol fundamental en el Departamento y la confianza en él radica en que su experiencia y dedicación para combatir la corrupción y promover la rendición de cuentas, que se consideran son puntos invaluables para sus esfuerzos globales.
“La creación y ocupación de este puesto demuestra la importancia que Estados Unidos otorga a la lucha contra la corrupción como un interés central de seguridad nacional y reitera el papel central que desempeñan las alianzas globales en esta lucha”, aseguró en esa oportunidad Blinken.
La presencia de Nephew se da dentro de las dos ultimaciones asignaciones de «Significativamente corruptos» a dos altas figuras de la política paraguaya: una fue la del ex presidente de la República, Horacio Cartes, la otra al actual vicepresidente, Hugo Velázquez, quien incluso ante dicha calificación dejó su candidatura a la presidencia. En el tema de rendición de cuentas alcanza a todos los funcionarios, siendo el principal el puesto que ocupa el titular del Poder Ejecutivo.
La seguridad nacional es prioridad para el gobierno de Joe Biden. Nephew y su equipo están trabajando para fortalecer la alineación del gobierno de EE. UU. en temas anticorrupción y trabajarán en estrecha colaboración con socios internacionales para promover la política anticorrupción del país.
La estadía del alto funcionario hará que cada sector político tome la interpretación que le convenga. Sin embargo, la agenda estará marcada por reuniones para recabar más datos sobre la realidad paraguaya.