En una sesión extraordinaria, la Cámara de Diputados sancionó la ley que establece la creación de la Superintendencia de Jubilaciones y Pensiones. La iniciativa, que ya contaba con la aprobación de la Cámara de Senadores, fue respaldada por 42 votos a favor.
Tras conocerse el resultado de la sesión se produjeron incidentes entre manifestantes y policías en las inmediaciones del Congreso. La ley había sido aprobada previamente en la Cámara de Senadores y recibió el visto bueno final en la sesión de la Cámara Baja.
La sesión extraordinaria, inicialmente convocada para las 11:30, fue suspendida y reprogramada para las 13:30. Antes del inicio de los debates, el diputado itapuense Sebastián Remesowski juró en reemplazo de Walter Harms, fallecido en un accidente de aéreo. Posteriormente, Carlos Núñez solicitó un cuarto intermedio y propuso la convocatoria a extraordinaria para discutir la ley de la Superintendencia.
El diputado Carlos Núñez Salinas destacó la importancia del proyecto: «Queremos dar nuestro acompañamiento a un proyecto que es de suma importancia para la República del Paraguay, para las miles de personas que hoy en día ponen toda su confianza en el Estado para cuidar de su patrimonio y su futuro. El proyecto de ley que se está estudiando es sustancialmente importante porque permitirá que, por primera vez, se tome con seriedad los fondos de jubilados», sentenció.
La diputada Cristina Villalba, presidenta de la Comisión de Presupuesto, detalló que el proyecto busca garantizar a los afiliados y beneficiarios de las entidades de jubilaciones y pensiones la provisión de prestaciones previsionales con calidad, eficiencia y eficacia, resguardando la integridad financiera de los fondos respectivos.
La legislación también establece la supervisión prudencial de la administración de recursos financieros y no financieros de las entidades de jubilaciones y pensiones, tanto públicas como privadas.
La presidenta de la Comisión de Presupuesto mencionó ocho instituciones o entidades que administran los regímenes del seguro social obligatorio, cuyas prestaciones previsionales están definidas según parámetros predeterminados en sus respectivas leyes.
Con 42 votos a favor, el proyecto fue sancionado, disponiéndose su remisión al Poder Ejecutivo para su promulgación o veto. Cabe destacar que el documento sufrió modificaciones en la Cámara Alta, especialmente en los artículos 27 y 31, y establece que la Superintendencia de Jubilaciones y Pensiones dependerá del Banco Central del Paraguay, con autonomía funcional y administrativa en el ejercicio de sus funciones.
