Sigue la polémica en un Tribunal por la desaparición de un CD como evidencia contra acusados de narcotraficantes que integran el Clan Arteta. En pleno juicio la Fiscalía había informado la semana pasada que se perdió el CD; entonces, el Tribunal había suspendido el juicio oral y público. Mientras, tanto ordenó que se traiga una grabación guardada en la SENAD. Este martes se reanudó el juicio, se escuchó la grabación que llegó también en un nuevo CD; pero la defensa del Clan Arteta se opuso porque no hay seguridad de que sea el mismo material, sostuvo.
Entonces, la defensa del Clan Arteta, representada por el abogado, Hugo Páez Acuña, planteó un incidente de nulidad de tal prueba. El juicio oral pasa de nuevo a otro cuarto intermedio y volverá a reanudarse el 1° de noviembre. En esta ocasión, la Fiscalía deberá contestar el incidente y tratar de defender que la prueba es la misma.
La prueba consiste en la grabación de escuchas telefónicas entre los miembros del Clan Arteta.
La primera polémica ya se desató con la desaparición del CD. La segunda polémica es que el Tribunal resolvió que el lunes 23 de octubre se constituirá en la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD), donde supone que hay una copia, para traerla. Y se fue y lo trajo. La defensa de los acusados de narcos había adelantado que cuestionará este trámite. Se trajo el nuevo CD y ocurrió lo que adelantó la defensa que no confía que el Tribunal traiga la misma grabación, reproducida por escrito en el expediente.
Los acusados son del Clan Arteta, un grupo dedicado al tráfico internacional de drogas. Según la Fiscalía, este clan puede operar para acopiar y transportar hasta 1.000 kilos de cocaína, proveniente de Bolivia. En ese sentido, presentó en su acusación el rol de cada uno de los procesados en la supuesta actividad ilícita y aseguró que el CD que está en la SENAD tiene el mismo contenido que lo desgrabado en el expediente del caso.
El Tribunal que está a cargo del juicio oral está integrado por las magistradas Alba González (presidente) e integrado por Dina Marchuk y Gloria Hermosa.