Nueva York.- Durante el 78.° período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), el embajador de Israel ante la organización, Gilad Erdan, protagonizó un episodio de protesta pacífica durante la intervención del presidente de Irán, Ebrahim Raisi.
Erdan levantó una pancarta con la imagen de Mahsa Amini, una joven de 22 años que falleció bajo custodia policial en Teherán, y con la inscripción «¡Las mujeres iraníes merecen libertad ya!» mientras Raisi pronunciaba su discurso desde el podio.
La acción de Erdan generó un revuelo en la sala, con imágenes compartidas en redes sociales que muestran cómo miembros del personal de seguridad de la ONU se acercaron al embajador para escoltarlo fuera de la sala. Durante este proceso, se oyeron voces que llamaban «terrorista» a Erdan y otros que afirmaban que «Israel es terrorista».
Diversos medios de comunicación, incluyendo The Jerusalem Post, inicialmente informaron que Erdan había sido detenido temporalmente por las fuerzas de seguridad de la ONU. Sin embargo, un portavoz de la organización aclaró que el embajador no fue detenido en ningún momento y que el incidente se considera cerrado.
El gesto de Erdan se centró en la denuncia de la situación de Mahsa Amini y en la demanda de libertad para las mujeres iraníes. La joven Mahsa Amini murió en circunstancias controvertidas mientras estaba bajo custodia policial en Teherán, lo que generó preocupación y debate en la comunidad internacional.