Industriales nacionales, con mucho esfuerzo, de nuevo, acompañan la Expo 2023. Lo hacen en momento de un creciente e imparable contrabando, que juega a matar la producción local. Aunque es un orgullo estar presente, es alto el costo en tiempo y dinero para estar en Mariano Roque Alonso, y lo es más cuando el mismo Estado es cómplice de los productos ilegales que entran en nuestro territorio.
Los productos de contrabando se ofertan frente mismo al Ministerio de Hacienda, sobre la calle Palma. Pese al grito de auxilio de los empresarios que trabajan de manera legal, no hay una mano solidaria eficiente dentro del espacio público para ayudarlos. El Grupo anti Contrabando que preside Emilio Fuster es uno de los grandes fiascos de éste gobierno que se está yendo.
El contrabando permeó toda la estructura nacional. Desde productos de la canasta familiar básica; como azúcar, leche, huevos, lácteos, hasta combustibles y elementos industriales pasan la frontera paraguaya sin abonar un solo céntimo. Obviamente, hay que decirlo, también hay socios de la Unión Industrial Paraguaya (UIP) jugando de contrabandistas. Ellos son los grandes supermercadistas, dueños de estaciones de servicios, entre otros.
Desde la Argentina, en la semana que pasó, mostraron la mafia de los combustibles en Clorinda, provincia de Formosa, Argentina. Fue publicado por el Canal Trece de Buenos Aires. Con imágenes, como prueba, evidenciaron varios puertos clandestinos que operan entre la citada ciudad y Nanawa, ex Puerto Elsa, en el departamento de Presidente Hayes, lado paraguayo. Sin embargo, ninguna institución paraguaya se tomó por aludida.
El citado caso en uno dentro de una realidad que desangra al Estado y constituye una filosa navaja en la producción. La Expo 2023 es buena oportunidad para continuar mostrando el esfuerzo del sector privado, pero también debe atender una situación que deteriora aun más la ya golpeada economía paraguaya. No hay que temer a la verdad, es una manera de hallar soluciones a un panorama construido sobre la alta corrupción público privada.
