El Instituto de Previsión Social es el botín de la corrupción y, para que no haya duda, todo queda registrado en su propia administración. La Contraloría General de la República ordenó una auditoría en la previsional. Hay un equipo técnico de la Contraloría que examina el departamento financiero de IPS y otro equipo que auditará exclusivamente el rubro de combustibles y rubricantes.
Una coincidencia llamativa es que las irregularidades fueron más frecuentes en época de las internas coloradas de fin de año. Y más llamativo aún es que IPS firmó un convenio con Petropar para que esta institución cubra la «necesidad» de nafta de aviación, para lo cual Petropar brindó tarjetas para proveerla. El tercer dato llamativo, según los informes, es que el IPS no tiene avión.
La provisión de combustibles para rodados, por una cantidad de 7.877 millones de guaraníes, en plena coincidencia con las internas coloradas es más que llamativo. Justamente por eso, la Contraloría formó un equipo especial que se dedicará a auditar este punto. El monto citado en este rubro comprende enero de 2022 a enero de 2023.
Con respecto a la auditoría, la información fue confirmada por la directora de Control Gubernamental de la Contraloría General de la República (UGR), Gladys Fernández, en una entrevista por el canal GEN. “El alcance es a todo el ejercicio fiscal 2022 y de enero a abril del 2023, son 16 meses que se van a verificar, más allá del alcance que se pueda modificar para meses posteriores”, especificó la funcionaria.
El objetivo es entregar el resultado de la auditoría al Congreso Nacional a finales del mes de agosto.
La Asociación de Asegurados del IPS prevé una manifestación el próximo viernes 23 de junio frente a la institución para protestar contra la corrupción. Justo cuando los asegurados denunciaban falta de medicamentos y de infraestructura para los familiares de pacientes internados, IPS gastó la suma de G. 345.705.961 (USD 47.487) en el lapso comprendido entre marzo del 2022 a marzo del 2023, en concepto de viáticos para participar de capacitaciones internacionales.
Otro tema llamativo es que el IPS tiene una sección que trabaja en tema de lavado y planchado; sin embargo, aparte, contrató la tercerización de este trabajo por un costo total de 485 millones de guaraníes. Por si fuera poco, la tercerización se hizo por 10 años.
Es normal escuchar denuncias contra el Instituto de Previsión Social por falta de medicamentos para los asegurados que pagan, por la escacez de médicos de alta especialización y por la saturación de los servicios por consultorios, que para conseguir hay que llamar a un call center, que tampoco funciona bien y, además, da la consulta para dentro de varios meses. Mientras tanto, la institución se convirtió en el botin de la corrupción.
