En una entrevista exclusiva para La Tribuna, la psicóloga Noelia Castillo compartió consejos sobre cómo acompañar emocionalmente a los niños con síndrome de Down, brindándoles un entorno de aceptación, apoyo y comprensión.
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Cada 21 de marzo, el Día Mundial del Síndrome de Down se celebra con el objetivo de sensibilizar y reflexionar sobre la inclusión de las personas con esta condición genética.
En Paraguay, uno de cada 700 niños nace con síndrome de Down, según estadísticas oficiales. Esta fecha invita a pensar en el papel fundamental de la familia, la escuela y la comunidad en la vida de estos niños.
Aceptación incondicional y apoyo emocional
Según la entrevistada, la base para el desarrollo de un niño con síndrome de Down es la aceptación incondicional y un acompañamiento emocional constante.
«Es esencial que los padres validen sus emociones, escuchen sus necesidades y refuercen sus logros, por pequeños que sean», indicó.
Aseguró que la expresión clara de afecto, brindar seguridad en las rutinas y fomentar la autonomía de manera progresiva son fundamentales en su crecimiento.
Además, señaló que aunque estos niños tienen las mismas necesidades emocionales que cualquier otro niño, a menudo requieren un acompañamiento adicional para regular sus emociones.
Fomentar la independencia y la autonomía
La psicóloga también abordó la importancia de fomentar la independencia sin generar ansiedad. Según Castillo, es fundamental ofrecerles tareas acordes a sus capacidades, respetando su tiempo y desarrollo.
«Debemos modelar la conducta que queremos que realicen, ofrecer instrucciones claras y reforzar sus avances. Celebrar cada pequeño paso les da confianza», explicó.
También subrayó que un entorno predecible y estructurado les proporciona seguridad y reduce la ansiedad ante nuevos desafíos.
La importancia de la inclusión escolar y social
Otro aspecto clave que destacó fue la integración escolar y social de los niños con síndrome de Down. Castillo enfatizó que la inclusión efectiva requiere la colaboración de la familia, la escuela y la comunidad.
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Además, resaltó que las actividades extracurriculares, como deportes y talleres, juegan un papel esencial en el desarrollo de habilidades sociales y en el fortalecimiento del sentido de pertenencia.
La psicóloga también advirtió sobre errores comunes que los padres deben evitar al criar a un niño con síndrome de Down.
«La sobreprotección, subestimar sus capacidades y compararlos constantemente con otros niños son actitudes que limitan su desarrollo. Debemos brindarles la oportunidad de enfrentar desafíos y aprender de manera independiente», señaló.
Castillo concluyó que creer en las capacidades de los niños es clave para su autoestima. «Si dudamos de ellos, también lo percibimos. Debemos ser su primer apoyo, ayudándoles a alcanzar su máximo potencial».
Este Día Mundial del Síndrome de Down, el mensaje es claro: brindar amor, comprensión y apoyo es fundamental para que cada niño, sin importar sus diferencias, pueda desarrollarse plenamente y alcanzar sus sueños.
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