El presidente Santiago Peña reglamenta el negocio de créditos de carbono, vía decreto. Paraguay monetiza sus recursos naturales y a partir de allí se podrá crear empleo para mucha gente. El sector que crecerá en este contexto es el forestal, informaron las autoridades.
Peña firmó este martes, en una ceremonia en Mburuvicha Róga, el Decreto que reglamenta la Ley N° 7190/23 “De los Créditos de Carbono”, con la participación de ministros del Poder Ejecutivo y referentes del sector privado.
Este paso del Gobierno Nacional apunta a llegar a la conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático (COP 30), que se celebra este año en Belén, Brasil, con una legislación moderna y proyectos íntegros para mostrar al mundo el potencial de Paraguay como pulmón verde, informaron las autoridades.
Peña reglamenta el negocio: Reducir contaminantes
Créditos de carbono se refieren a créditos generados por proyectos ejecutados con el propósito de reducir las emisiones contaminantes al medio ambiente. Tienen valor internacional.
La Ley 7.190/23 los define como un «instrumento comercializable que asigna una equivalencia de reducir, evitar o capturar una tonelada de gases de efecto invernadero de un proyecto determinado».
Con la reglamentación, Paraguay abre las puertas a que proyectos ambientales, como de reforestación, puedan emitir créditos de carbono a las empresas interesadas en adquirir estos bonos.
Peña reglamenta el negocio: certificación internacional
La certificación de un crédito de carbono como tal es realizada por empresas internacionales, que identifican cuánto carbono se genera en una región y el impacto del proyecto de reforestación o protección de recursos naturales en la misma.
El ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, una vez que peña firmó el Decreto, se encargó de presentarlo en un acto en Mburuvicha Roga. Informó que «se trata de una gran oportunidad para Paraguay, porque el mercado voluntario está pagando hoy entre US$ 3 y 15 US$ por tonelada de carbono secuestrado, y el mercado regulado entre US$ 40 y US$ 70.
Dado el tipo de proyecto de secuestro de carbono que el Paraguay ofrece en su sector forestal, esto puede convertirse en un mercado de exportación de entre US$ 300 y US$ 500 millones al año”, afirmó Giménez.
Se crea la Dirección de Mercados de Carbono
El Decreto establece la creación de la Dirección de Mercados de Carbono (DMC), la cual garantizará la transparencia en la gestión de créditos de carbono y abrirá las puertas para la participación de productores, empresarios e inversionistas.
Asimismo, se pondrá en marcha el Registro de Créditos de Carbono, que permitirá el monitoreo y control de los proyectos, evitando la doble contabilidad y asegurando la trazabilidad de las transacciones.
El decreto también establece beneficios clave para productores y comunidades locales, incluyendo la exoneración del canon para comunidades indígenas, asegurando que los beneficios lleguen a todos los sectores de la sociedad.