El anuncio de la suspensión de la cooperación directa entre la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD) y la Administración de Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos marcó un punto de inflexión en las políticas de lucha contra el narcotráfico en Paraguay. Este cambio, que implica el traslado de responsabilidades hacia la Policía Nacional, generó un amplio debate sobre su impacto en las estrategias de seguridad del país.
Inicio de la controversia
La decisión fue comunicada tras una evaluación del rol de la SENAD en las operaciones conjuntas con la DEA. Según las autoridades, esta medida busca optimizar recursos y centralizar esfuerzos en una institución con mayor alcance, como la Policía Nacional.
Sin embargo, surgieron preocupaciones sobre cómo la reorganización afectará las capacidades especializadas que la SENAD ofrecía.
Declaraciones recientes del presidente Santiago Peña
Esta mañana, en conferencia de prensa, el presidente Santiago Peña aclaró nuevamente la posición del gobierno respecto a la relación con la DEA. “Nosotros queremos una mayor colaboración. Estamos hablando con la DEA y con el nuevo gobierno de Estados Unidos que asume en enero. Paraguay es un gran aliado en la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico”, señaló.
Peña enfatizó que las decisiones tomadas buscan fortalecer la seguridad nacional y garantizar que las colaboraciones internacionales respondan a los intereses del país. También destacó la voluntad del gobierno de canalizar el apoyo de la DEA a través de la Policía Nacional, lo que considera un paso importante para consolidar su capacidad operativa.
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El gobierno paraguayo anunció varias acciones para reforzar la lucha contra el narcotráfico. Entre estas, se incluyen la adquisición de 500 patrulleras, equipos de comunicación avanzada, chalecos y combustible. Además, se incorporaron 5.000 nuevos agentes a la Policía Nacional, lo que según las autoridades podría incrementar significativamente su fuerza operativa.
Declaraciones anteriores sobre cooperación con la DEA
El ministro del Interior, Enrique Riera, confirmó que la DEA no abandona Paraguay, sino que redirigirá su apoyo técnico y logístico a la Policía Nacional. Esta estrategia busca potenciar la Unidad de Inteligencia Sensible (SIU), que asumirá un rol protagónico en las operaciones antidrogas.
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