El presidente de la República, Santiago Peña, firmó el decreto 3131 por el cual declara asueto el 24 y el 31 de diciembre para los funcionarios públicos.
El decreto señala que “las celebraciones de Navidad y Año Nuevo son de gran tradición y significación para el pueblo paraguayo, y conllevan preparativos y desplazamientos de los ciudadanos por todo el territorio de la República”.
Agrega que también es una “oportunidad de gran impacto para el turismo interno, el comercio en general y el movimiento de paraguayos que han migrado a la capital o centros urbanos para volver al terruño o bien visitar a familiares”.
Otras fundamentaciones señalan que las fiestas de Navidad y Año Nuevo producen gran impacto económico:
La declaración: