La Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) interceptó un cargamento de 8.000 pastillas de éxtasis durante controles rutinarios en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi. La droga, proveniente de Alemania y valorada en aproximadamente 120.000 dólares, estaba oculta dentro de un termo calefón enviado como encomienda aérea con destino final en Ciudad del Este.
El operativo comenzó cuando los agentes detectaron indicios sospechosos en el paquete gracias a los equipos especializados y procedimientos con perros detectores de drogas. Posteriormente, el paquete fue sometido a un análisis mediante rayos X, revelando anomalías que llevaron a una inspección más detallada. Con la autorización judicial, se abrió la encomienda en el Palacio de Justicia, donde se hallaron las pastillas de MDMA, comúnmente conocido como éxtasis, empaquetadas cuidadosamente.
Detectaron patrón de envío de éxtasis
El éxtasis incautado destaca un patrón recurrente: el uso de Paraguay como punto de redistribución de drogas hacia países vecinos, especialmente en la zona de la Triple Frontera. Según Francisco Ayala, director de Comunicación de la Senad, esta región ha cobrado relevancia en el tráfico de sustancias ilícitas, particularmente hacia Argentina y Brasil. Aunque no se detuvo a ninguna persona de forma inmediata, se iniciaron investigaciones para rastrear a los responsables de la operación.
El uso de encomiendas es una modalidad habitual en el tráfico de drogas sintéticas, ya que permite eludir controles físicos y dificultar la identificación de los remitentes y destinatarios, quienes suelen proporcionar datos ficticios.
La Senad ha identificado en el pasado redes criminales vinculadas a este tipo de operaciones, incluyendo casos de envío de cocaína desde Paraguay hacia Europa y, en este caso, la recepción de drogas sintéticas desde el extranjero.
Su consumo e impacto
El éxtasis, conocido como la «droga del amor», es una sustancia química que genera efectos de euforia, empatía y desinhibición, siendo particularmente popular en fiestas electrónicas y eventos grupales. Este consumo ha mostrado un aumento constante en la región en los últimos años, especialmente durante épocas festivas, donde el turismo y el entretenimiento masivo incrementan la demanda.
Sin embargo, su uso conlleva riesgos graves. Ayala advirtió que, debido a la falta de control sobre su composición, las dosis pueden contener sustancias adicionales o niveles tóxicos que ponen en peligro la vida de los consumidores. Además, el consumo prolongado genera tolerancia y dependencia, afectando tanto la salud física como mental de los usuarios.
La Senad continúa reforzando los controles en puntos estratégicos como aeropuertos y pasos fronterizos, en un esfuerzo por frenar el tráfico de drogas sintéticas y otros estupefacientes.
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