Un artículo publicado por la prensa brasileña, destaca que el nuevo puente sobre la Bioceánica que unirá Paraguay y Brasil, será la vía de comunicación que conecte ambos océanos, pasando por cuatro países que componen el circuito final de este sucesor del Canal de Panamá.
La publicación destaca que en el extremo Sur del Pantanal, un proyecto sin precedentes conecta a Paraguay y Brasil en el marco de la Ruta Bioceánica, también conocida como la Ruta de Integración Latinoamericana (RILA).
Este corredor vial, diseñado para unir el océano Atlántico, en Brasil, con el Pacífico, en Chile, atraviesa cuatro países y promete revolucionar la logística comercial en Sudamérica. La prensa brasileña, específicamente el periódico Folha de Sao Paulo, ha destacado la importancia de esta obra, describiéndola como un avance estratégico en infraestructura para toda la región.
El corazón del proyecto es el puente internacional que cruzará el río Paraguay, uniendo Porto Murtinho, en el estado de Mato Grosso do Sul, con Carmelo Peralta, Alto Paraguay en nuestro país. Con 1.294 metros de longitud y un presupuesto de 78,9 millones de dólares, invertidos en esta obra financiada por Itaipú Binacional, la cual ya ha alcanzado el 63% de avance. Según el periódico, el puente no solo reducirá distancias, sino que también posicionará a Sudamérica como un actor clave en las rutas comerciales hacia el continente asiático.
Un puente sobre el río Paraguay, estratégico para la región
El puente incluye dos viaductos de acceso y una sección atirantada de 632 metros sobre el río Paraguay, diseñada para soportar altos volúmenes de tráfico. Se espera que esté operativo en el primer trimestre de 2026. Este proyecto es liderado por el Consorcio Pybra, conformado por empresas paraguayas y brasileñas, bajo la supervisión del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
La Ruta Bioceánica reducirá hasta 20 días de transporte y 7.000 kilómetros en el trayecto hacia los mercados asiáticos, según datos recogidos por el medio brasileño. Actualmente, las exportaciones desde el puerto de Santos requieren largos desvíos por el Canal de Panamá o el continente africano, lo que incrementa costos y tiempos.
Avances en infraestructura complementaria
Para garantizar la operatividad del corredor, se están adecuando rutas viales en los cuatro países participantes. En Brasil, se pavimentan y mejoran 117 kilómetros de la BR-267 entre Porto Murtinho y Alto Caracol, con inversiones que superan los 700 millones de reales del Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC). Por su parte, en nuestro país, se trabaja en la pavimentación de tramos que conectan con Argentina, asegurando un flujo continuo para el transporte internacional.
El periódico, que también publicó en formato digital, la versión original de la nota en portugués, resalta que el puente no solo conectará dos países, sino que será el símbolo de una integración más amplia en Sudamérica. Además, señala que las aduanas binacionales facilitarán el comercio, permitiendo despachos aduaneros centralizados en el lado brasileño, lo que acelerará los procesos logísticos.
Un largo camino de planificación del puente sobre el río Paraguay
La Ruta Bioceánica comenzó a gestarse en el año 2000, cuando los presidentes sudamericanos plantearon un corredor que uniera el Atlántico y el Pacífico. Aunque inicialmente se exploraron rutas alternativas por Bolivia y Perú, se eligió el trazado actual por Paraguay y Argentina por ser más viable desde el punto de vista logístico y económico.
Dorival Oliveira, gerente de SetLog/MS, recordó que la pieza clave para completar la Ruta Bioceánica siempre fue el puente. Folha de Sao Paulo también subraya que, pese a los avances en infraestructura, será crucial movilizar equipos de control fronterizo como la Policía Federal y organismos aduaneros para garantizar la operatividad del corredor.
Un impacto que trasciende fronteras
Con un recorrido de 2.220 kilómetros desde Campo Grande (Brasil) hasta el puerto de Antofagasta (Chile), la Ruta Bioceánica promete dinamizar el comercio y reducir costos de transporte en Sudamérica. Según el medio del vecino país, este proyecto transformará a Paraguay y Brasil en ejes centrales de las cadenas de suministro globales, fortaleciendo la integración económica en la región.
Finalmente, destaca que el puente no es solo una estructura física; el mismo simboliza una visión compartida de desarrollo y modernización. Al completarse en 2026, marcará un hito en la historia de la infraestructura sudamericana y abrirá nuevas oportunidades comerciales para los países involucrados.
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