El can Zorro detectó cocaína oculta en licuadora industrial en una empresa que se dedica a envíos de encomiendas. La carga debía llegar al Aeropuerto Internacional «Silvio Pettirossi» y luego a España.
El cachorro que huele más allá de los metales o plásticos fue un gran héroe durante el operativo antidrogas. La jueza, Rosarito Montanía y el fiscal, Luis Said, intervinieron durante la apertura de los artefactos.
Las autoridades perforaron el motor de la licuadora y encontraron casi tres kilos de cocaína en total, concretamente 2 kilos y 949 gramos.
La droga se llevó al Laboratorio Forense de la SENAD para su análisis correspondiente. La forma que se ingeniaron los narcotraficantes fue llamativa; pero la brigada de canes de la SENAD y en especial, el can Zorro, pudieron más.
Las autoridades no dieron detalles aún sobre quienes fueron los que enviaron la carga. La SENAD informó que las investigaciones continuarán al respecto.