La ciudad de Villeta se convirtió en escenario de un importante paso para el sector industrial del país con la inauguración de una nueva planta de reciclaje en base a la producción de acero de alto cromo y carburo. La moderna instalación, gestionada por el Grupo Siom, bajo el Régimen de Maquila, cuenta con una capacidad de producción de 1.200 toneladas anuales y se posicionará como un motor de desarrollo regional al generar empleos directos e indirectos para los habitantes de la zona y su inversión inicial fue de 12 millones de dólares.
En el acto inaugural, el Ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, destacó la relevancia de esta inversión en la expansión de la cadena de valor de la industria metalúrgica en Paraguay.
Beneficiarios director e indirectos de la planta de reciclaje
La planta de reciclaje emplea directamente a unas 60 personas y se proyecta que el número de empleos indirectos alcance las 200 personas en esta primera etapa, con posibilidades de expansión futura. Durante la ceremonia, el Ministro Giménez subrayó la valía del trabajador paraguayo, resaltando su aporte a la industria nacional y a la importancia de las inversiones en capital humano como pilar del desarrollo económico. Además, Giménez se refirió a la Ruta Bioceánica como una herramienta clave que impulsará el comercio internacional al conectar a Paraguay con Brasil y Chile.
Esta obra vial, que culminará en el puerto de Antofagasta en Chile, permitirá reducir considerablemente los tiempos de transporte hacia mercados asiáticos, lo que representa una gran oportunidad para que productos paraguayos lleguen con mayor competitividad al exterior.
Matías Capdeville, accionista del Grupo Siom, explicó que la decisión de elegir Paraguay como sede de la planta se basó en el potencial de crecimiento del país, su legislación favorable para la inversión y la calidez de su gente. La iniciativa, mencionó, se enfocará en el reciclaje de piezas industriales y en la reducción de la huella de carbono, un aspecto fundamental en la estrategia de sustentabilidad del proyecto.
Esta planta no solo representa un nuevo actor dentro de la industria metalúrgica nacional, sino que también consolida a Paraguay como un destino atractivo para inversiones responsables y con visión de futuro, favoreciendo la creación de empleo, la innovación y el desarrollo sustentable.