César Addario Soljancic es un destacado economista paraguayo, actualmente reconocido como el principal asesor financiero del presidente de El Salvador, Nayib Bukele. Su trayectoria profesional abarca una amplia experiencia en el ámbito de las finanzas y la economía, especialmente en mercados emergentes. Durante su estadía en Paraguay habló brevemente con La Tribuna brindando su visión sobre la situación actual de la economía paraguaya, la gestión del presidente Santiago Peña y las oportunidades que tiene el país.
Afirma que Paraguay necesita dar a conocer sus fortalezas económicas a nivel global y enfocarse en infraestructura para impulsar aún más su economía. Recomienda al presidente Santiago Peña mejorar la infraestructura fronteriza con Brasil, para reducir los costos logísticos y consolidar el grado de inversión para permitir a las empresas paraguayas acceder a créditos más baratos y ser competitivas.
Nayib Bukele es un fenómeno a nivel mundial porque sus políticas lograron reducir la criminalidad en El Salvador hasta convertirlo en unos de los países más seguros, además logró una estabilidad económica, que hizo que siga gozando de una alta popularidad en su gestión. Sobre el sueño de muchos políticos paraguayos de presentarse como el «próximo Bukele paraguayo», Adario dijo que son realidades totalmente diferentes y que el fenómeno no podría replicarse en nuestro país.
¿Cómo ve o cómo evalúa la situación actual de la economía paraguaya?
Paraguay está viendo los frutos de hacer las cosas bien de manera constante y sostenida durante muchos años. Es uno de los países más estables de la región, encabeza las previsiones de crecimiento para este y los próximos años según el informe más reciente del Banco Mundial, y recientemente ha obtenido el grado pleno de inversión, que significa que está calificado con grado de inversión por todas las firmas que nos evalúan.
Estas condiciones son envidiables y se reflejan en el día a día de empresas e inversores. Lo que nos hace falta, sin embargo, es que todo esto se conozca más allá de nuestras fronteras y de los especialistas en mercados, que sí tienen claras todas las ventajas macroeconómicas del país. El Paraguay tiene el escenario óptimo para traducir todas estas fortalezas en apuestas en sectores como la infraestructura, para impulsar aún más la economía y llevar a un mayor desarrollo del país, con mejor calidad de vida para la población.
Si tuviera que asesorar al presidente Santiago Peña en materia económica, ¿qué recomendaciones concretas le daría?
El presidente Peña es una persona sumamente instruida, con una formación de primera, que está conduciendo con éxito las políticas económicas para el Paraguay, el acuerdo con Itaipú, el grado de inversión, las apuestas por la inversión, por la integración de los mercados regionales. Yo pondría énfasis en dos cosas que ayudarían a mejorar aún más las perspectivas para el país. Primero, las fronteras, para poder agilizar el comercio con Brasil, no centrarnos en los puentes en Ciudad del Este, lo que podría compensar nuestros costos logísticos, y por ende bajar el precio del flete, generando un ahorro importante, que superaría con creces la inversión en infraestructura que se debería hacer para ello.
Segundo, apuntalar el grado de inversión, para que las empresas privadas paraguayas puedan salir el mercado a obtener créditos más baratos y con eso volverse más competitivas. Paraguay de por sí tenía acceso a tasas bajas, y ahora son todavía más bajas, una oportunidad que no tienen muchos de nuestros vecinos de la región y que puede impulsar grandemente a las empresas del país.
En relación con el Corredor Bioceánico, ¿qué acciones específicas considera que Paraguay debe desarrollar para aprovechar mejor esta oportunidad?
Paraguay debería pensar en un canal que sea un brazo del río Paraguay para dar agua cruda al Chaco. Así, en vez de solo tener tanques australianos, que son muy buenos y complementan, se podría llevar el agua necesaria para la expansión agrícola que tiene el país hacia esa zona.
El presidente Bukele ha logrado reducir la inseguridad y mejorar la economía de El Salvador. ¿Cree que este fenómeno podría replicarse en Paraguay?
Las medidas de seguridad impulsadas por el presidente Bukele han sido muy exitosas en El Salvador, han marcado un antes y un después en la vida de millones de salvadoreños y han llevado tranquilidad a zonas que antes estaban asediadas por los delincuentes. Pero la criminalidad en Paraguay es muy baja y es distinta, no son países comparables en ese sentido. Lo que nosotros tenemos es un nivel de crimen bastante menor al que había en El Salvador, acá no existen las pandillas, por lo que no es un formato replicable al cien por ciento para las necesidades que tiene el Paraguay.
Varios políticos y dirigentes paraguayos se llegaron a presentar como: «el próximo Bukele paraguayo». ¿Qué opinión le merece esta comparación y cree que un fenómeno similar podría darse en Paraguay?
Nadie puede identificarse a ser igual que otra persona, porque los fenómenos son únicos e irrepetibles a lo largo de la historia. Los grandes hombres no han tenido un igual; aunque otros puedan haberse inspirado en su legado, ninguno ha representado verdaderamente su esencia. Nosotros somos un país con partidos políticos centenarios, que dirimen puertas adentro, con internas, quiénes son sus candidatos, y hay una modalidad de conducción que lleva muchísimos años y que genera la estabilidad política que tiene el país.
Entrevista de: Asdrubal Fretes.
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