El Banco Central del Paraguay (BCP) presentó un informe en el marco de la reunión mensual del Comité de Política Monetaria (CPM), que muestra el desempeño actual de la economía del país. El mismo, está cargado de informaciones para entender la realidad actual en el país.
En julio, el Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAEP) creció un 5,3% en comparación con el año anterior. Este aumento se debe a la buena dinámica en varios sectores, incluyendo servicios, manufacturas, construcción, ganadería y agricultura. También, el Estimador de Cifras de Negocios (ECN) mostró un crecimiento interanual del 7,8%, impulsado principalmente por mayores ventas de combustibles y productos agropecuarios.
Los créditos al sector privado también siguen en expansión. En julio, el saldo total de crédito bancario creció un 13,2% en términos interanuales, con un aumento del 14,6% en moneda nacional y del 10,5% en moneda extranjera. La tasa de interés promedio activa en moneda nacional se ubicó en 13,5%, con una ligera reducción respecto al mes anterior.
El estado actual de la economía muestra algunos puntos negativos
En el lado negativo del estado actual de la economía, es la inflación, la cual tuvo una variación mensual de -0,2% en agosto. Este descenso se atribuye a la reducción de precios en algunos alimentos, aunque se observaron incrementos en los precios de combustibles, servicios y bienes duraderos. La inflación interanual disminuyó de 4,4% en julio a 4,3% en agosto. Además, el Índice de Precios al Consumidor sin alimentos y energía (IPCSAE) aumentó un 0,3% mensual y un 3,5% interanual.
Las exportaciones también enfrentaron dificultades. En agosto, las exportaciones totales en dólares cayeron un 15,8% en comparación con el año anterior, lo que resultó en una variación acumulada de -0,1%.
Esta reducción se explica principalmente por la disminución en las exportaciones de energía eléctrica y maíz, aunque se compensó con un aumento en los envíos de granos de soja. Las importaciones también mostraron una caída del 3,1% interanual, aunque el crecimiento en las importaciones para consumo interno fue notable, alcanzando un 17,2%.
A pesar de los desafíos en el comercio exterior, el saldo de comercio cerró en agosto con un superávit de USD 488,2 millones. Este panorama presenta una economía que, a pesar de ciertos retrocesos, sigue mostrando áreas de crecimiento y actividad.
