La soja no sólo cultivan los grandes empresarios; también lo hacen los pequeños productores. Es el rubro que atrae también a campesinos que tienen pequeñas parcelas teniendo en cuenta que hay mercado seguro para la venta.
Si bien, a nivel gremial, los exportadores buscan más mercados y mejores precios, al campesino le parece una opción importante, porque se trata de un rubro que se quiere no solo a nivel internacional sino también dentro del país. Los pequeños productores se organizan a través de Cooperativas.
Alfred Fast, presidente de la Federación de Cooperativas de la Producción, destacó que los pequeños productores de soja están considerados ahora como muy importantes porque juntos suman y venden sus productos tanto a nivel país como en el exterior. «La soja es el cultivo más importante de la agricultura familiar campesina hoy en día», afirmó Fast.
Señaló que hay hechos concretos que demuestran que así lo es: en el país se registran más de 40.000 parcelas de menos de 20 hectáreas donde se produce soja, manifestó.
El desafío del sojero es mantener una disciplina y ser eficientes: «Tenemos que ser muy eficientes. Los productores tienen que producir 2.500 kilos de soja por hectárea para cubrir sus gastos», indicó Fast. Entonces, los pequeños productores se organizan, se juntan y así se expanden, según el comentario de Fast.
A pesar los problemas climáticos, este sábado se realizó un acto de lanzamiento de la zafra sojera en Natalio, departamento de Itapúa. Los productores están muy esperanzados de que el producto le va rendir buen dinero.
Los productores hablaron de los problemas climáticos adversos que tuvieron que enfrentar, especialmente de las escasas lluvias. También hablaron de los precios internacionales para la venta, que se mantienen por casi 20 años, pero con los costos de producción más caros.
Otros departamentos están en peores condiciones
Sin embargo, según la presentación de la situación por parte de los gremialistas, la situación no está tan mal en Itapúa como en otros departamentos como Amambay. San Pedro, Canindeyú y Concepción. En estos departamentos, los productores vienen sufriendo sequía por tres años consecutivos, comentaron, y pidieron incluso al gobierno un plan de contingencia para ellos.
Además, hablaron de la necesidad de ampliar el mercado, porque por ahora Argentina es el principal comprador de la soja paraguaya, con un 75% de la producción.
Participaron del acto, a parte de Fast, el presidente de la Federación de Gremios de la Producción, Héctor Cristaldo; el presidente de la Coordinadora Agrícola del Paraguay, filial Itapúa, Marcio de Souza; el ministro de Agricultura y Ganadería, Carlos Giménez; y el presidente de la Republica, Santiago Peña.