A partir de ahora, el gobierno central de Argentina estará a cargo de la hidrovía y ya no los gobiernos de las provincias por donde cruza el río Paraná. Generalmente, las provincias tenían peso a la hora de fijar reglas para el transporte internacional por el río Paraná en el país vecino.
La confección de las licitaciones para los trabajos de dragado del río, balizamiento y la definición de las tarifas de peajes, entre otras temas de la citada hidrovía, sobre los cuales se deben tomar decisiones, ya no estarán a cargos de los gobernadores de las provincias. Ni siquiera la institución que fungía hacerlo a nivel nacional.
Este miércoles, el periódico digital misionesonline.net publicó que el Gobierno nacional de Argentina «emitió el acta de defunción del Ecovina, ente regulador creado en 2021 que le daba a las siete provincias por las que pasa la hidrovía, la participación en distintos aspectos relacionados a la gestión de la vía navegable», como las tareas señaladas en el párrafo anterior que ahora pasan a ser facultad del gobierno central.
El presidente Javier Milei fulminó a Ecovina y decretó su extinción bajo el fundamento de que este organismo «desde su creación, no logró un normal o regular funcionamiento, ni ejerció efectivamente las misiones y funciones que le fueron encomendadas, por lo que no alcanzó los objetivos propuestos”.
Conste, que el decreto de Milei no mencionó la crisis que se generó con el tema del peaje con el gobierno de Paraguay, inclusive con otros países como Brasil y Bolivia, que le viene exigiendo desde el gobierno anterior que el peaje sea decidido por consenso como dice un Acuerdo internacional sobre la hidrovía Paraguay-Paraná. El fundamento de Milei se refirió solamente a problemas internos de Argentina.
En decreto también habla de la necesidad de reducir el gasto público, como una de las excusas para declarar la defunción de Ecovina. En la práctica, según publica misionesonline.net lo que sucedió fue que el organismo integrado por las provincias ribereñas fueron delegadas a la Subsecretaria de Puertos y Vías Navegables (SPVN), lo que incluye la facultad para realizar la licitación y adjudicación tanto de la traza principal que va desde la zona de confluencia hasta la salida oceánica, como de otros tramos menores y complementarios de la hidrovía.
A esto se agregan las versiones políticas que señalan que el ex ministro de Economía, Sergio Masa, era la que manejaba el tema de la hidrovía durante el gobierno de Alberto Fernández, a través de Subsecretaria de Puertos y Vías Navegables (SPVN) y los gobernadores de las provincias ribereñas. El gobierno de Paraguay buscó ponerse de acuerdo sobre la crisis de la hidrovía con Masa, pero no hubo solución.