Culminó hoy en el estadio mundialista de Lusail, la copa Asiatica de naciones, en la que el dueño de casa, Qatar obtuvo el título de campeón por segunda temporada consecutiva, al derrotar a la soprendente grata revelación de la competencia, Jordania, por tres goles a uno.
Lo curiosa y llamativa que resultó esta final de la XVIII Copa Asiática de naciones, fue la determinación referil que sancionó tres penales a favor de los que resultaron finalmente vencedores y que aprovechó brillantemente Akram Afif, hecho muy poco frecuente en el futbol, en finales y en partidos de selecciones. En las tres oportunidades, fue finalmente el VAR el que indujo a la sanción máxima.
El único gol del partido que no fue por resolución de pena máxima, fue el empate transitorio que a los 22 minutos del segundo tiempo logró el jordano Yazán Al-Naimat, autor tambien de uno de los tantos de su selección en la semifinal.
En 1999 Paraguay (Luque en particular) fue testigo de un caso similar, no registrado en nuestro pais ni antes ni despues de aquella gran victoria de Colombia sobre Argentina por la copa América, en la que el artillero albiceleste Juan Martín Palermo, dispuso tambien de tres lanzamientos penales. Pero a diferencia de lo que supo aprovechar Akram Afif, concretando un hat trik, el argentino malogró los tres tiros.
Más allá de la justicia o no de las determinaciones arbitrales, el hecho mereció todo tipo de comentarios en las redes, especialmente los extremos como el que hizo notar que «VAR rima con Qatar»).
Pese a la derrota, ha sido muy aplaudida la gran actuación en este torneo de Jordania, la mejor de toda su historia, llegando por primera vez a una final al derrotar 2 a 0 a la primera bicampeona asiática de la historia, la selección de Corea del Sur.
