Los Juegos ODESUR, Asu2022, refresca en la memoria nacional la calidad que tiene el paraguayo y la paraguaya. Hasta ahora, es bueno decirlo, existe respeto en todo sentido a todos los atletas extranjeros, se valora incluso la supremacía en algunos casos sobre los nuestros. Es que en el deporte hay que saber ganar y perder. Otro detalle favorable es el trato afectuoso a los miles turistas que están en el país.
Falta actualizar los datos de la Dirección de Migraciones para saber con precisión cuántos extranjeros están en Paraguay por los Juegos Odesur. Hay que sumar a los deportistas, profesionales asistentes, técnicos y turistas. Además hay que agregar la cantidad de periodistas de Sudamérica y el mundo que llegaron al país para cubrir los juegos.
A la cantidad de visita se debe sumar igualmente todo el movimiento que genera el evento deportivo en sí. Hay un acompañamiento de interés de parte de la ciudadanía, que llena los estadios alentando a la selección hasta en deportes o disciplinas quizás desconocidas.
Figuras como la de Paola Ferrari y “Matu” Peralta en el basket, o Benjamin Hocking y Luana Alonso en la natación, los Pynandi en fútbol de playa y otros están llenando de orgullo y sus actuaciones movilizan la auto estima país.
En una situación en donde vemos a atletas emocionados con gradas llenas alientan a soñar optimista que quedarán atrás los tiempos con 10 o 15 personas en las gradas. Concretamente hay un público deseoso de “distracciones” y los eventos deportivos, además, generan un movimiento económico.
Paola Ferrari, emblema del básquet nacional destacó el apoyo del público, calificando lo que viven como algo inesperado. “Esto es una motivación enorme. En los momentos importantes aparece el público y se siente”, indicó, agregando que considera un sueño cumplido ver a su familia y a mucha gente en la cancha.
Hay que decirlo, Asu2022 está mostrando una energía nacional de manera positiva, todo en medio de una clase política ineficiente y la corrupción que sigue sacando calidad de vida.
Camilo Pérez, Presidente del Comité Olímpico, destacó la cantidad de personas que se ven en las calles y más allá de la asistencia, subrayó la calidad de las personas que llevan adelante cada detalle de la organización. “Es una explosión de gente en cada recinto, agradezco al pueblo que asiste de manera total a los escenarios. Nos quedan chicos pero estamos contentos”, manifestó.
Según su análisis, los primeros cinco días fueron un éxito total.”Lo deportivo acompaña bastante, y esa es una gran satisfacción, Vemos hoteles llenos; en la calle se ve a los extranjeros y allí notamos un gran éxito”, dijo
El siguiente desafío
Con la explosión de tantas disciplinas, Camilo Pérez considera que el siguiente paso es atender a la base piramidal que va a crecer. “Con esto se generarán más deportistas de alto rendimiento y para ellos debemos seguir generando recursos”, resaltó.
Infinitas veces escuchamos a la educación como base para el reflote económico, El deporte es una herramienta educativa que brinda valores y don de gente. Desde lo económico, esta es la oportunidad de sembrar bases para que el balón sea nuevamente un generador de ingresos apoyando a los atletas. Está en nosotros llegar a que una criatura conozca a nuevos ejemplos y se ponga con orgullo la camiseta de la siguiente Pao Ferrari, tras llenar las canchas y apoyarla fecha a fecha.