Otra atipica Supercopa de España, como las seis ultimas que se juegan fuera de la preninsula en territorio de Arabia Saudita, tuvo como protagonistas este domingo a los superclásicos rivales del balompié hispano, Barcelona y Real Madrid, que se adjudicó el primero con contundente 5 a 2.
La disputa trasladada por obra y gracia del poderío económico de los organizadores asiáticos, se celebró en el King Abdullah Sports City de Jeddah en Yeda, Arabia Saudita un gran complejo que incluye en su estructura siete mesquitas y seis courts de tenis.
El cuadro madrileño se adelantó muy temprano en el marcador gracias a su super estrella Kylian Mbappé cuando apenas iban cinco minutos de juego. Fue todo un espejismo, porque despues se desencadenó la lluvia de tantos azulgranas apuntados por Lamine Yamal (foto), Robert Levandowski, doblete del brasileño Raphinha y Alejandro Baldé.
El golero polaco Wojciech Szczesny de Barcelona, vio la roja a los 11′ del segundo periodo quedando Barcelona con diez pero con gran ventaja en el marcador que apenas pudieron descontar los merengues cuando finalmente Rodrygo maquilló la derrota con un segundo tanto sobre los 15 de la fase final.
El encuentro fue conducido por el colegiado español, insignia de FIFA, Jesús Gil Manzano.
Este trofeo inicialmente enfrentó a campeones de Liga y Copa del Rey, siendo su primer vencedor el equipo de Real Sociedad de San Sebastián que goleó por 4 a 1 a Real Madrid en la temporada 1982-83. Desde el 2020 tuvo cambio de formato incluyendo a finalistas perdedores de los principales torneos hispanos, elevando a cuatro el número de competidores.
En la presente edición, el Barza venía de eliminar al Athletic de Bilbao (2-0) y el Real Madrid de imponerse al Mallorca (3-0) en los precedentes cotejos semifinales. Estos resultados, que cayeron como anillo al dedo para los anfitriones, posibilitaron la gran final soñada que le terminó dando al cuadro azulgrana, el más laureado de la historia en este evento, su decimoquinto cetro.
