Una chispa de felicidad que recorrió el mundo

Felizmente el hecho ocurrido con Libertad de Pirayú ya forma parte de la anécdota de este humilde club del interior que conquistó su primer título tras 94 años de espera. La alegría tuvo una pausa a raíz de la “electrocución” de la copa que quedó colgada entre los cables, pareciera que también ellos querían ser parte del festejo, y en realidad lo fueron, pero con la alegría de que no se produjo otra cosa que no sea “chispas” de felicidad. Lo ocurrido con el equipo albirrojo debe quedar como ejemplo para próximos festejos. En este material también repasamos otras situaciones inesperadas que acontecieron en torno a un trofeo de fútbol.

FESTEJO CON UN INVITADO INESPERADO

El presidente Juan Carlos Romero fue un protagonista directo de lo ocurrido en el bus de los campeones: “Yo estaba en la caravana y fue impresionante ver las chispas, la copa quedó por los cables y fue un momento de mucho susto que gracias a Dios no paso a mayores; la copa estaba en manos de Justo Germán Giménez que solo sufrió una pequeña quemadura. Por esta situación que ahora ya es anecdótica, Libertad de Pirayú es conocido en el mundo, tuvimos una gran repercusión, me llamaron de Argentina y de otras partes. Yo creo que hasta los cables quisieron sumarse al festejo que conseguimos después de 94 años”. Con respecto al futuro destacó que la atención ahora está centrada a la precopa Paraguay donde tendrá como rival a Cerro Porteño de Costa Segunda o 15 de Mayo de Ñuati, ambos equipos pertenecientes a la liga de Paraguarí.

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REPERCUSIÓN INTERNACIONAL

El capitán Osmar Guillen, 43 años y autor del gol en el partido de vuelta que posibilitó el tercer partido por el título, describió el momento de la “electrocución” de la copa: “Farreamos hasta que la copa quedó por los cables, terminado el susto seguimos con la celebración. Realmente fue una situación difícil, pasamos un gran susto y preocupación, chispeos de aquí para allá, pero felizmente no hubo nada que lamentar. Gracias a esta desgracia con suerte, nuestro club se hizo viral porque tuvo una gran repercusión internacional.” En cuanto al título logrado destacó: “A mis 43 años, este era el título que me faltaba en la comunidad y realmente no tiene precio”.

LA CAÍDA DE LA COPA DEL REY

El 20 de abril de 2011 debería ser uno de los días más recordados por el madridismo. La noche en la que la resistencia de José Mourinho venció al tiki-taka de Pep Guardiola para, poco después, ver cómo cambiaría la hegemonía de ambos equipos en Europa. La Copa del Rey más especial. Y, aun así, llegó en dudoso estado, ya que a Sergio Ramos se le cayó desde lo alto del autobús en mitad de una celebración por todo lo alto en Cibeles. «Era tirarla o caernos los dos», sostuvo el camero, rey de ceremonias. La ocasión lo merecía y, de hecho, esa final de 2011 supo mejor que varias de Champions, por cómo sucedió.

EL ROBO DEL MÍTICO JULES RIMET

El mítico trofeo Jules Rimet fue el primero que se entregaba a cada campeón del mundo de fútbol. En 1970, en México, Brasil se lo quedó por haberlo ganado en tres oportunidades. Años después fue robado del edificio de la Confederación brasileña El trofeo estaba exhibido en una inexpugnable caja de plexiglás antibalas. Pero tenía un defecto: la parte posterior había sido fabricada con madera y pegada con cinta a la pared. Los ladrones retiraron la cinta, tomaron la copa y salieron lo más campantes por el mismo lugar por el que habían ingresado. Más tarde se supo que el instigador del robo había sido un argentino llamado Juan Carlos Hernández, que solía traficar con oro robado.

PICKLES, EL HÉROE EN INGLATERRA 66

En 1966, Inglaterra tenía la Jules Rimet en exposición, como un objeto de deseo para el pueblo británico. De alzarse con el título podría disfrutarlo por los siguientes cuatro años. Una noche, sin embargo, desapareció y encendió las alarmas de Scotland Yard, que se lanzó a pleno en una desesperada búsqueda. En su propia tierra no podían sufrir tamaña humillación, pero apareció en escena un personaje inesperado: el perro Pickles.
El 27 de marzo de ese mismo año David Corbett sacó a pasear a su perro como todas las mañanas, pero notó un comportamiento raro en el animal: «Puso la atención en un paquete medio enterrado, cubierto de periódicos, detrás de un árbol. Lo descubrí y vi a una mujer que sujetaba un plato sobre su cabeza, y una placa con las palabras Alemania, Uruguay, Brasil». Sin quererlo Pickles había salvado el honor inglés: recuperó la copa que cien agentes de la policia británica no habían podido recuperar.

MESSI SE SALVÓ DE MILAGRO

Tras haber derrotado a Francia en la gran final y haber alzado el anhelado trofeo en el estadio Icónico de Lusail, a poco de su arribo los jugadores, cuerpo técnico y federativos abordaron un autobús con dirección a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Viajando en la parte más alta de un autobús descapotado, Messi (con la Copa en mano), Ángel di María, Nicolás Otamendi, Rodrigo de Paul y Leandro Paredes reaccionaron de último segundo para evitar ser «degollados» por el cable de luz que pudo provocar una desgracia. Tan cerca pasó el alambre de los futbolistas que Paredes perdió su gorra de campeón del Mundial al ser derribada por el cableado, mientras los involucrados soltaron una risa nerviosa abrazando fuertemente el trofeo de la FIFA.

En la gráfica principal, se ve al omnibus detenido y la copa colgada del tendido eléctrico

VER TAMBIEN: https://www.instagram.com/reel/C-QrgNBCT9O/?igsh=M